Capítulo 27: Más cerca de la verdad

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CAPÍTULO 27:

La luna ilumina tan fuerte aquella noche que a penas tengo que utilizar luz alguna en la casa para ver el camino. Sentada en una de las tumbonas del jardín y con un vaso de vino en la mano, observo las estrellas. Si antes no podía parar de sentir tranquilidad y paz por donde fuera, ahora mi cabeza no paraba de dar vueltas y vueltas. Teníamos las cosas bien preparadas, ¿cómo diablos se había torcido todo tan rápido?

Lo teníamos todo fácilmente preparado. Ahora se sentía más como una improvisación tras improvisación. Una improvisación que se sentía más como deber que como ayuda, como iba a ser antes.

¿Y lo peor de todo? Que no le podía decir nada a nadie.

No podía hablar con el tema con las chicas porque nadie sabía nada, ni podían saber nada del tema y era lo que por que me pasaba. ¿por qué me metía en cosas que no debía de meterme? ¿Por qué era así?

Saco el teléfono de mi bolsillo y busco en la agenda. Número tras número van pasando hasta que me quedo en él. El nombre brilla en la pantalla "Emily". Suspiro mirándolo. ¿Qué debía de hacer? Muchas veces, hablar con ella había sido lo único que había necesitado para poder deshacerme de todos los problemas que tenía, para deshacerme de ese nudo que tenía en el estómago formado. Incluso cuando habíamos hablado de tonterías, me había liberado.

Miro la hora, la una y media de la noche, aunque conociendo a las chicas, estarían seguramente de fiesta o algo parecido.

"No lo hagas" me decía mi cabeza.

"Hazlo" me decía mi corazón.

Y lo hago, finalmente lo hago. Solo una charla, deshacerme de todo lo que tenía en mi corazón. Solo necesitaba una charla, necesitaba hablar, necesitaba una amiga y Emily era todo aquello para mí.

El tono de la llamada se me hace peor que cualquier espera. Uno a uno, empiezo a pensar que no me va a responder. Sin embargo, es al último, cuando la llamada se corta y la escucho al otro lado.

-¿Alison?- su voz se escucha fuerte, sobre la música del fondo.

-¿Te pillo mal?- murmuro.

-Yo... No- responde- ¿Qué te pasa? ¿Todo bien con Joaquín?

-Sí, perfecto- le digo- Solo... que...- suspiro- Necesitaba a alguien con quien hablar.- Emily se calla, el sonido de la música de fondo se escucha cada vez más lejano, hasta que finalmente, a penas se hace audible- ¿Emily?

-Estoy aquí, para lo que quieras- la escucho finalmente.

-Gracias- solo eso y ya noto en mi estómago, un poco más de tranquilidad- De verdad....- no sabía ni cuanto.

-Estoy en una discoteca ahora mismo, con las chicas, si quieres, podemos quedar en algún lugar cercano o...

"Quedar" repito para mí. Miro hacia dentro de la casa, Joaco estaba tan agotado psicológicamente como yo el otro día. Quizás, no le importara en el momento.

-¿Vienes a mi casa?

-¿A tu casa?- sí, sabía como sonaba, pero en aquel momento, era donde más segura me podía sentir- ¿Estás segura?

-Joaquín está dormido y... prefiero estar cerca de él.

Silencio absoluto al otro lado de la línea. Seguramente, Emily habrá pensado lo mismo cuando le había dicho aquello, que era una auténtica locura. Seguramente me diría que no a venir, pero...

-Sí, en media hora estoy allí.

-Gracias...

Y pensando que me sentiría mejor de lo que me había sentido después de llamar, la verdad es que me siento peor de lo que me había sentido antes. Estoy más nerviosa, con más ansiedad, pero raramente, más tranquila en cuestión de mi mente.

Ms. DiLaurentis - Emison Fanfic (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora