-Alerta, no cierren los ojos ni un solo segundo-Susurró la autoritaria voz del jefe, a través de los transmisores-No se precipiten, S01 por el norte, S94 por el sur, elijan sus equipos, los demás vienen conmigo-Ordenó
La operación que se llevaba a cabo en ese momento era altamente peligrosa, puesto que se trataba de apresar a un grupo de narcotraficantes medianamente grande. La única ventaja que tenía el equipo de agentes era el factor sorpresa y la larga trayectoria del jefe que los guiaba.
El agente D.O. era conocido por no haber fallado jamás en ningún procedimiento, sin embargo, era temido por la misma razón. Él era el jefe de escuadrón encargado de los procedimientos más peligrosos, y quien fuera asignado a ese escuadrón, sabía de antemano, que debía pisar el campo de batalla con el pensamiento de que no volvería a casa esa noche, pues los planes del jefe eran siempre fríamente calculados para que sus estrategias lograran sus resultados, sin importar la cantidad de pérdidas que se tuviera en el proceso.
Mientras los criminales fueran sacados de las calles, al agente D.O. no le importaba cuantos agentes de su equipo perecieran.
Cruel, lo llamaban algunos, sin embargo, su filosofía era distinta, y la misma era compartida por el director general de la AFI (Agencia federal de investigación), razón por la que el agente D.O. seguía al mando de su equipo.
Por supuesto, ningún agente era obligado a permanecer en ese escuadrón después de terminar su entrenamiento, ya que el encargado de vigilar ese entrenamiento era precisamente el agente D.O., quien se encargaba de dejarles en claro la manera en la que él trabajaba, por eso, si alguno de los agentes, no estaba de acuerdo con que su vida no fuera una prioridad por sobre el objetivo a quien perseguían, podía solicitar su cambio de departamento sin ningún problema.
Sin embargo, la mayoría terminaba quedándose a pesar de saber que si se trataba de su vida o detener al objetivo, el jefe siempre daría la orden de detener al objetivo, disparando él mismo a sus agentes si eso fuera necesario.
La razón era simple.
Las organizaciones que ellos perseguían eran peligrosas, y sacarlas de las calles significaba una infinidad de vidas inocentes que eran salvadas.
Así que, si debía morir, incluso el escuadrón completo para que una sola organización fuera detenida, eso seguía significando menos perdidas que si dicha organización siguiera cometiendo sus crímenes.
El director general de la agencia siempre se preocupaba de estudiar detenidamente a los agentes en entrenamiento básico, eligiendo con cuidado a los que enviaría para el entrenamiento avanzado con D.O, y era por esta selección cuidadosa que casi la mayoría al final se quedaba en el escuadrón, pues el director, a través de los años, ya había aprendido a reconocer a los que serían agentes dignos de estar en el escuadrón de crímenes organizados, donde D.O era el jefe.
-Aquí S01, equipo listo, permiso para proceder-Pidió el agente S01, el agente S94 repitió lo mismo segundos después, ambos equipos esperando la orden del jefe para comenzar el operativo
-Adelante
Rápidamente el agente S01 junto a su equipo se dirigió al norte del edificio donde sabían que los criminales se encontraban en una reunión, de la misma manera, el agente S94 se llevó a su equipo al sur, y los restantes se quedaron con D.O, siguiendo las órdenes de éste para ingresar al lugar.
D.O. estaba acostumbrado a perder siempre, un mínimo de 3 o 4 hombres en cada operación, por eso siempre se encargaba de llevar el equivalente a tres sub-equipos con él, mientras los demás equipos rodeaban el lugar para evitar que alguien escapara.
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Fallen[SooKai/2Min]
FanfictionEl cielo y el infierno no son como los cuentos religiosos lo cuentan, y por supuesto, no son como lo leíste en una novela juvenil. Por que nada es solamente blanco o negro. Los ángeles no eran el bien absoluto solo por pertenecer al cielo. Los demon...