Después de haberse quedado sin vehículo, Kai debía esperar un taxi para que lo llevara a casa, KyungSoo le había dicho que iría a buscarlo todos los días, pero Kai le había dicho que no era una princesa, frase que el mismo KyungSoo nunca se cansaba de repetirle. No había de que temer, era una zona decente, con guardias de edificios en cada esquina y al estar marcado, los demonios tampoco se le acercarían, por lo que no había peligro, sin embargo, siempre existen excepciones, y aquella noche fue una de ellas.
Kai había notado algunas sombras moviéndose en el pasillo escasamente iluminado que había entre dos edificios cerca de donde él esperaba su taxi, no le prestaría atención en otras circunstancias, sin embargo, él vio de pasada el rostro de una persona que claramente era un ser humano poseído por un demonio.
El hombre caminó directo hacia él, mientras sonreía de medio lado y aunque Kai intentó escapar, se trataba de un demonio en el cuerpo de aquel humano, y éste lo arrastró hacia el oscuro pasillo, entonces, el moreno pudo ver que todas las sombras que antes había visto moviéndose no eran personas en lo absoluto, sino sombras de demonios. El hombre empujó a Kai contra la pared de uno de los edificios y sacó una navaja, la cual pasó por el rostro del moreno mientras todavía sonreía de una manera psicópata.
Y de repente, clavó la hoja en el estómago del moreno, sacó la navaja y volvió a apuñalar el estómago una y otra vez, hasta que el demonio lo liberó y el hombre volvió en sí, viendo sus manos ensangrentadas sosteniendo la navaja aun enterrada en el estómago del moreno. El hombre se asustó y se fue corriendo, tirando la navaja en el camino y recién ahí, Kai se dejó caer al suelo.
Tosió y echó sangre por la boca, ni siquiera sentía el resto del cuerpo y lo único que atinó a buscar fue su teléfono para llamar a KyungSoo.
Cuando el demonio llegó junto a él, Kai ya había perdido demasiada sangre, se encontraba débil y mareado. Ni siquiera intentó presionar la herida para aminorar el sangrado, era inteligente, sabía que moriría, y sin embargo, lo único que quería hacer antes, era ver a KyungSoo.
-Ahora sí puedo decirlo, KyungSoo? Voy a morir de cualquier forma así que...puedo decirlo...te amo...y de verdad, lo siento... no pude...no pude recordar a tu JongIn...-Lloró y KyungSoo lo abrazó con fuerza-Sabes... cual es mi verdadero nombre?
-No te esfuerces, podrás contármelo después de que te curen esto-Murmuró KyungSoo con la voz entre cortada, pero Kai sonrió y continuó
-Yo también me llamo JongIn...y de verdad lamento... no ser el JongIn que querías...
Fue lo último que dijo antes de morir.
Taemin había tenido un mal presentimiento todo el día, por lo que había estado vigilando a KyungSoo el día entero, por eso, cuando lo vio correr por las calles sin importarle que lo reconocieran, supo que algo andaba mal.
Esperó cualquier cosa, menos encontrar el cuerpo inerte de Kai en aquel oscuro pasillo.
Sus ojos picaron y su garganta se cerró, quería gritar y ningún sonido salía de su garganta, sus piernas se debilitaron y cayó al suelo de rodillas, procesando lo que veía frente a él.
-Él está muerto! Yo tenía que haberlo cuidado! Si no hubiera estado preocupado de que nadie me reconociera podría haber llegado antes y llevarlo a un hospital, yo pude...yo...-MinHo abrazó el sollozante cuerpo de Taemin, tratando de reconfortarlo, pero éste se soltó y corrió el pequeño espacio hasta donde KyungSoo lloraba y abrazaba fuerte el cuerpo sin vida del moreno, lo sacudía de a ratos, gritándole que despertara, reclamándole por dejarlo solo, pidiéndole perdón, una y otra vez-Jong...in...-Su voz sonó ahogada
MinHo también se acercó con el corazón nervioso, esperaba con todas sus fuerzas que su teoría fuera correcta. Día tras día, MinHo había notado como la marca se desdibujaba y aunque probablemente ni Kai ni KyungSoo lo hubieran notado, la mirada de KyungSoo había cambiado demasiado, y MinHo pareció ser el único en notarlo.
Ahora, esperaba que la reversión de la marca se hubiera completado antes de la muerte del moreno, de esa manera, su alma no moriría y reencarnaría en algún momento.
Buscó el lugar exacto en el que debería estar la marca, pero su ropa lo tapaba, por lo que se agachó y descubrió un poco la piel, suspirando de alivio.
La marca de KyungSoo no estaba.
Taemin fue el siguiente en notarlo, sus ojos se abrieron muy grandes, y necesitó tocar la piel para asegurarse de que la marca definitivamente había desaparecido, estaba a punto de preguntarle a MinHo si estaba seguro de que su alma seguía ahí, pero entonces un ángel de la muerte bajó del cielo y se acercó a ellos, confirmándoles así, que el alma de JongIn estaba a salvo, de otra manera, el ángel de la muerte no tendría nada que hacer ahí.
KyungSoo estaba en una especie de shock, sin comprender lo que a su alrededor sucedía, Taemin quería gritarle que el alma de JongIn estaba a salvo, pero MinHo lo detuvo con la mirada, y Taemin comprendió.
A JongIn no le hacía bien ninguno de ellos, en su primera vida había muerto a manos de Taemin, en la segunda a causa de KyungSoo y en la tercera, aunque de manera indirecta, también a causa de KyungSoo, pues era culpa del demonio que Kai se hubiera quedado sin auto y tuviera que esperar un taxi.
Entonces, Taemin decidió que ya no buscaría a la reencarnación del alma de su hermano, de la misma manera que no permitiría que KyungSoo se enterase de que JongIn podría reencarnar, y así, quizás, JongIn podría tener una vida normal por primera vez...
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Fallen[SooKai/2Min]
FanfictionEl cielo y el infierno no son como los cuentos religiosos lo cuentan, y por supuesto, no son como lo leíste en una novela juvenil. Por que nada es solamente blanco o negro. Los ángeles no eran el bien absoluto solo por pertenecer al cielo. Los demon...