Fallen[SooKai/2Min]

Capítulo 8

Las historias del cielo y el infierno, no siempre eran tan acertadas como lo creían los mortales, quienes simplemente escuchaban y creían en el discurso de cualquier sacerdote cada domingo.

Era por ello que la gente temía ir al infierno y creía que el cielo era divino.

Nada de eso era realmente así.

El cielo, en realidad estaba plagado de politiquería y burocracia, los ángeles que ahí habitaban no lo veían de esa manera, pues ellos habían crecido allí, viendo aquello como algo normal, sin embargo, los ángeles como JongIn o Taemin, quienes ya habían sido marcados como condenados antes de pisar el cielo y convertirse en ángel, tenían una tendencia más alta a terminar cometiendo un pecado y perder sus alas.

De la misma manera, ellos eran siempre mucho más fuertes que cualquier otro ángel, lo cual era la manera en la que quienes los entrenaban notaran el tipo de ángel que eran.

Por eso, a Taemin no se le permitía bajar a la tierra con frecuencia, pues temían que pecara y terminara convirtiéndose en un demonio luego de perder sus alas. Incluso, más de una vez, habían hecho la vista gorda de algún pecado que él hubiera cometido, pues en el momento en que sus alas se fueran, y conociéndolo, sus superiores sabían que él incluso por voluntad propia se dejaría llevar al infierno como un demonio.

Y esa era la razón por la que hasta ese momento, JongIn y Chanyeol no lo tenían en muy buena estima, pues por todos era conocida la lista sin fin de razones por las que Taemin debería haber sido expulsado del cielo hace mucho y sin embargo ahí seguía, con sus perfectamente oscuras alas brotando orgullosas de su esbelta espalda.

Por otro lado, JongIn siempre había mantenido un perfil bajo, por lo que nadie nunca notó que él era igual a Taemin.

Ahora que JongIn veía la vida desde otra posición, podía ver que aquel ángel hibrido era en realidad un prisionero de sus propias alas.

Razón por la cual, no importaban las amenazas que Taemin soltara por la boca, JongIn sabía que no las cumpliría.

-Hay incluso algún maldito pecado que no hayas cometido?!-Se quejó KyungSoo después de escuchar la historia completa-Por qué mierda a ti no te quitaron las alas como le hicieron a JongIn? No es justo...

-El puto cielo es injusto, idiota...

-Taemin...

-Tiene que saberlo, no cambia el mundo pero me siento mejor si alguien más sabe la mierda que ocurre allá arriba

-Eso no es...

-Chanyeol, cállate-El mencionado quiso quejarse, sin embargo, entendió que era el único que pensaba lo contrario de la afirmación del hibrido rubio frente a él

-Y...ahora qué?-Pregunto KyungSoo

-Nada, ustedes siguen con su vida y yo los persigo para matar demonios-Sonrió en anticipación

-Creí que creías que el infierno era genial y el cielo una mierda...

-Dije que el cielo es una mierda, no que no fuera divertido matar estúpidos y débiles demonios que no pueden ni pisar tierras mortales-Rodó los ojos

-TU eres una mierda-Insultó KyungSoo y Taemin sonrió, feliz por el alago

Los primeros rayos del sol trajeron consigo un nuevo día, y con ello bastante trabajo para Taemin, quien terminó al menos un poco destruido del cansancio después de matar a todos los demonios que trataron de acercarse a JongIn y KyungSoo.

Quizás luego de una semana de la misma rutina, finalmente se daría cuenta de que no era para nada divertido hacer aquello.

Sin embargo, incluso después de un mes entero, Taemin todavía sonreía satisfecho después de terminar, no importaba que estuviera jadeando en el suelo, él aun así seguía divirtiéndose con aquello.