Patito Feo. (James Maslow & Tn)

Capítulo 12

- No te molestes, vamos en un taxi, te vemos en casa. –sonreí.
- Vale, nos vemos.
- Adiós. –sentí como el pitido de que ella había colgado. Mire a James.

Quien se encontraba concentrado comiendo su trozo de pastel.

- James ¿nos vamos?
- Claro. –contesto automáticamente levantándose de la banca. Caminamos en silencio hacía el estacionamiento.

Luego de aquella escena en la fila. No habíamos hablado de aquello y nos habíamos entretenido contándonos historias o solo bromeando.

De lejos pude ver el taxi estacionado fuera de mi casa, no quería que James supiera donde vivía y menos que los chicos vieran con quien estaba, así que le hice parar en una casa cualquiera. La verdad que no conocía a casi nadie en ese vecindario y era extraño.

Era una mala idea lo sabía, James no se iría hasta verme entrar así que decidí que lo mejor sería, que conociera de verdad mi casa.

- Aquí es. –pronuncie al llegar. –la pase muy bien, gracias.
- Yo también, espero que otro día puedas ser mi guía y mostrarme otros lugares.
- Por supuesto. Nos vemos el lunes. –bese su mejilla y baje rápidamente del auto.
- ¡_____, espera! –le escuche gritar, me di media vuelta y camine hacía él.
- ¿Qué pasa?
- ¿Nos podemos ver mañana? –pregunto tímido. Me moría por decirle que sí, pero simplemente no podía.
- No lo creo James, los chicos han llegado y se van el domingo, pasaré tiempo con ellos...y sabes que no les agradas. –James sólo suspiro. –es mejor que; nos vemos el lunes.
- Está bien, hasta el lunes. –yo solo lo mire. James encendió el motor de su auto negro y comenzó a conducir.

No había sido para nada bueno al ver pasado tiempo con él. Yo era débil, y lo estaba demostrando. Suspire y camine de nuevo hacía la casa.

Mi madre no estaba y llegaría tarde, tampoco le importaba que los chicos se quedaran, hasta tenían habitación propia.

Y bueno, llave de la casa también.

- ¡____! –exclamo Jenny contenta, antes de abrazarme y dejarme sin respiración. –te extrañe.
- Yo igual. Pero, me dejas sin aire. –ella solo rió y se separo de mí, ruborizada.
- Hola. –dijo a un lado Liam, no habíamos hablado hace mucho y la última vez habíamos discutido sin ninguna razón.
- Liam. –susurre y corrí a abrazarlo, de todas maneras era mi mejor amigo. Un hermano. Él respondió a mi abrazo. –lo lamento.
- No hay nada que lamentar, fui yo el tonto que hizo que discutiéramos.
- Te extrañe.
- Yo también. –beso mi mejilla y volvió a abrazarme. Un carraspeo hizo que nos separáramos. Yo solo reí.

Camine hacía Jenny y la abraze de nuevo. Luego de un tiempo de saludarnos y abrazarnos, ellos subieron sus maletas a sus habitaciones. Debíamos hablar.
Sentados en la sala. Silencio incomodo, nadie hablaba y Liam no sabía nada.
Jenny abrió la boca.

- Bueno, di nos que tienes en mente.
- ¿Le dijiste que estaba aquí? –pregunte, ella asintió.
- ¿Estabas con él? –pregunto Liam. Yo solo asentí y vi como él se levantaba. – ¿Por qué? –pregunto furioso.
- Porque es parte de nuestro plan. –dije levantándome yo también.
- ¿Plan? ¿Qué plan? –pregunto un poco más tranquilo, sentándose con su novia. –espera, déjame adivinar ¿Adam? –____ rió, sus dos mejores amigos tenían una excelente relación.
- Si, bueno, le conté a Adam lo que sucedió hace dos años y tuvo una idea, más bien, un plan.
- Vale... ¿de qué se trata?
- Resumiendo, una venganza. –Liam levanto una ceja, divertido.
- Venganza. –repitió. –continúa.
- Pues que hiciera algo parecido a lo que él me hizo en el pasado.
- ¿Para qué?
- Para hacerlo sufrir.
- Me agrada. –sonrió Liam. –me gustaría que ese imbécil sufriera.
- Liam. –murmuro Jenny. Quien hasta el momento se mantenía callada. –no puedes dejar que _____ haga algo como eso. La venganza es mala.
- Por Dios Jenny. –le dije. –no será algo tan malo.
- ¿No? ____ ¿Te escuchas?