KILLERS OF THE NIGHT

CAPÍTULO FINAL: MICHAEL FINNEGAN HUDSON

6 meses después

POV FINN

- ¡Vamos Rachel aguanta!- le digo a mi esposa mientras la llevan en silla de ruedas al quirófano. ¡Resulta que se ha puesto de parto así de repente! Estábamos haciendo la comida cuando de pronto me dice que ha roto aguas. ¡Pero si tenía que salir de cuentas de aquí a tres semanas! Y así ha sido. Parece que Michael quiere salir antes de tiempo. De camino al hospital, he llamado a todos nuestros amigos y ahora estamos todos acompañando a Rachel. Esto parece un episodio de Friends.

- Respire, Sra. Hudson.- le dice una de las enfermeras. Sra. Hudson. ¿ A qué suena bien? Todavía no me creo que Rachel y nos casásemos hace cinco meses. Fue algo rápido, íntimo y un poco loco. Pero sobre todo fue perfecto. No quisimos hacer algo muy grande porque creímos que no hacía falta. Hace 5 años que estamos enamorados, no teníamos que demostrarle nada a nadie; sólo a nosotros mismos. Por esto, sólo invitamos a la familia y a nuestros amigos. ¡Fue tan divertido! Santana, Brittany, Quinn y Kurt fueron las damas de honor de Rachel y Puck fue mi padrino. Fue el segundo mejor día de mi vida, (el primero fue el día que la conocí).- Ya estamos.- entran a Rachel en la sala y sale el médico.- Muy bien. Ahora sólo podrá entrar uno de vosotros.

- Voy yo que soy el padre.- digo dando un paso al frente.

- Acompáñeme.- lo sigo y me da una bata de color verde.- Tiene que ponerse esto.- Hago lo que me dice y me lleva a la camilla dónde está Rachel. La cojo de la mano.

- Vamos cielo que tú puedes.

- ¡Te voy a matar Finn Hudson!- dice y yo me río. Sé que no lo dice enserio. Sé que sus insultos son producto del dolor de las contracciones que siente ahora mismo. Lo mal que lo debe de estar pasando la pobre...

- Contracciones cada 30 segundos, doctor.- le comenta la enfermera al doctor.

- Ha llegado la hora.- dice.- Vamos a ponerle la epidural. Enfermera.- le da la aguja al doctor y este se lo inyecta a Rachel. Mi esposa grita de dolor y empieza a respirar con dificultad.- Tranquila, Rachel. Ahora tienes que respirar y estar tranquila. Coge aire y respira hondo.- Hace lo que le dice.- Perfecto. Ahora quiero que empujes con todas tus fuerzas cuando yo te lo diga. ¿Vale?

- Vale.- le contesta con un hilo de voz. Está agotada.

- Tú puedes, mi amor.

- Empuja ahora, Rachel.- le ordena el doctor y ella empuja fuertemente.- Ahora respira y vuelve a empujar. ¡Eso es!- Rachel hace un esfuerzo casi sobre humano.- Lo estás haciendo de maravilla, Rachel. ¡Un poquito más!- Me aprieta tanto la mano que casi me la rompe.-Sólo un empujón más y ya estará.- Y de repente, oigo uno de los sonidos más hermosos que oído nunca: el llanto de mi hijo al nacer. Lo miro y es tan y tan frágil... Podría morirme de la ternura que siento ahora mismo. Estoy tan sensible que no puedo evitar llorar un poco.- Y aquí está vuestro hijo.- Lo coge en brazos y las enfermeras de ocupan de cortarle el cordón umbilical. El niño no hace más que llorar y yo no puedo estar más feliz- Toma, Rachel.- le da el niño a Rachel y ella lo coge en brazos.- Has sido muy valiente.

- ¡ Dios mío! Es nuestro hijo, Finn.-

- Lo sé- le doy un beso en la frente.

- Y es precioso como su padre.- Sonrío.

- ¡Anda no digas tonterías! También se parece un poco a ti.- se ríe un poco.

- Es perfecto.