Entre un amor del pasado.(2- Serie magnates apasionados)

3:Equivocación.

Tayler  se retiró a su habitación después de una provechosa conversación  con Alessandro y los invitados de este. 

Estaba exhausto, deseaba tomar una ducha y  luego  ir a la cama. Ya sabía cuál era su habitación. Cada vez que iba de visita se le preparaba la misma habitación. Su padrino era como un padre para el. Desde pequeño solía visitarles  todas las vacaciones,aunque después de crecer aquello había ido cambiando no obstante solía visitarle una o dos  veces al año.

Al entrar a la habitación encendió el  bombillo.

La sorpresa se reflejo  notablemente en su rostro  allí en su cama estaba muy bien dormida  su secretaria. Apenas podía ver partes del camisón  de dormir que tenía pero aquello fue suficiente para que su imaginación  volará libremente. Imaginaba aquellas curvas  debajo del camisón. 

Cierta parte de su cuerpo  cobro vida propia. Pero lo que más le preocupaba era ¿Como iba a poder dormir con aquella tentación a su lado?

La ducha  le ayudó a relajarse un poco . No obstante tenía que dormir allí, la demás habitaciones  estaban ocupada y no le apetecía  dormir  en el piso o en el sofá. El sofá  era demasiado pequeño para  un hombre  como él.

Afortunadamente el cansancio  hizo su trabajo  y  logró dormirse varias horas después.

Miro al espléndido  hombre que dormía a su lado y cerró los ojos y lo volvió a abrir ¿Estaba  soñando  o realmente  su jefe estaba semidesnudo durmiendo a su lado?
Se pellizco un brazo y medio grito cuando sintió el dolor del pellizco.
Tayler  despertó  inmediatamente tenía el sueño ligero.

Con el pelo revuelto, los ojos entre cerrado y el plano abdomen a la vista,  representaba una sensual imagen.

Ella ya estaba fuera de la cama para cuando él  despertó del todo.

-¿Usted durmió ahí?- preguntó, mientras se pasaba una mano por el pelo por tercera vez en un minuto.

-Si- respondió con tranquilidad.  Mirando a la mujer delante de él.

¿ Acaso sabía ella lo sexy que se veía con ese camisón?

-¿Junto a mi?

La pregunta  le hizo volver a la realidad.

-Si, afirmó.

Observo como ella habría los ojos.

-¿En la misma cama?

-Eso parece- respondió mirando el lado de la cama en la que ella había dormido.

Por alguna extraña razón  todo aquello le resultaba divertido, almeno por el momento. Mientras que ella estaba tensa.

-¿Pero porqué  nos han asignado la misma habitación?- dijo, caminando en la habitación de un lado a otro.

-Pensaron que somos parejas.

- Tal vez se equivocaron- se apresuró a decir.

-Lo dudo, está habitación siempre es preparada para mi, desde que tenía seis años.

-Pero entonces...

-Los empleados pensaron  que eres mi pareja. Anoche hice algunas averiguaciones  y todas las demás habitaciones están ocupadas.

-¿Pero porque  pensaron  eso?

-No lo sé, tal vez no especifique  que eres mi secretaria. Supongo  que asumieron que eras mi pareja.

-¿ A cuanta mujeres  a traído aquí?

-Una, hace tiempo.

Recordar a Zoé , hizo que su pecho se oprimiera.