Días atrás Tayler le había llevado a almorzar a un hermoso lugar, había conversado mucho sobre el bebé.
Asique habían hecho cita para ir aquel día a hacerse el ultrasonido. Ambos estaban ansiosos por saber el sexo del bebé, sobre todo Tayler. Se le veía emocionado y su rostro se iluminaba cada vez que sentía al bebé moverse.
La primera vez ella le había tomado de la mano y la había colocado en su vientre, cuando el bebé se movió Tayler se había quedado asombrado y maravillado.
Para ser un hombre que un principio no quería hijo, estaba loco por aquel bebé.
Miriam a veces no podía creer el cambio que este había dado, él hombre estaba hecho una monada.
Si tan sólo la amara hubiera sido el hombre perfecto, pero tenía que conformarse con lo que había, al menos sabia que amaba a su hijo. Había algo que no dejaba de rondar por su cabeza, Irina, aquella odiosa mujer, había escuchado a Tayler hablar con ella el día anterior, la conversación había girado a temas de negocios, pero el punto era que siempre estaba llamando, usualmente lo hacía al teléfono de la casa, aquello tenía a Miriam incómoda.
-¿Estas lista?- pregunto Tayler a asomándose por la puerta entreabierta.
-Solo me falta peinarme.
-Vamos mujer, se no hace tarde.
Ella miró su reloj y sonrió un poco, aún había tiempo pero aquel día Tayler estaba más inquieto de lo normal.
-Bajo en un minuto.
-Iré sacando el coche del garaje.
Para cuando Miriam bajó, ya Tayler estaba en el coche esperándola.
De camino a la clínica el tema de conversación giro en base al bebé, habían decidido empezar a buscar nombres cuando supieran el sexo del bebé.Cuando llegaron no tuvieron que esperar mucho para ser atendidos.
Tayler miraba a Miriam la cual estaba acostada en la camilla, su vientre estaba descubierto y el médico procedía a untarle un tipo de gel.
Apretó un poco la mano de la joven cuando imágenes del bebé empezaron a aparecer en el monitor.
Ella no se perdía las emociones que expresaban su rostro. Iba desde la felicidad a la tristeza.
Tal vez el estaba pensando en su amada Zoé ¿Estaría él deseando que en lugar de ella fuera su difunta prometida que estuviera allí? No tenía como saberlo. A veces podía leer en el como un libro abierto y otras en cambio no expresaba nada.
Dejo de mirarlo y se concentró en el monitor allí estaba su bebé. Era un sentimiento que no podía explicarse con palabras, era más que maravilloso.
-Definitivamente tendrán una niña-dijo el doctor.
Tayler sonrió y la miro orgulloso.
-¿Escuchaste?, es una nena. ¡Que maravilla!
-Si, es maravilloso- estuvo de acuerdo.
-Tenemos que empezar a comprar cosas para la niña, decorar la habitación de rosa, porque a las niñas le gusta el color rosa...
Ella no le interrumpió lo dejo divagar. Parecía estar en otro mundo.
Cuando él doctor entro nuevamente al consultorio, él aún estaba hablando.
Ella miró el doctor y este asintió dándole a entender que no era la primera vez que veía una situación como aquélla.
Minutos después abarroto al doctor con preguntas, ella había permanecido en silencio, una cosa era segura y era que estaba fascinado con la nena. Le hacía mucha ilusión saber que tendría una niña. Quería hablar con su familia, ellos necesitaba estar al tanto de la situación. Ya no podía seguir retrasando lo inevitable.
Cuando tuvieron la foto de la niña en mano , él no dejaba de contemplarla fascinado.¿Cómo había sido capaz de rechazar aquella criatura? ¿Cómo había sido capaz de pensar que no quería un hijo? Había estado viviendo en el pasado, pero ya no más. Nunca fue tan consciente como en aquel entonces de que un hijo era algo maravilloso. Una calidez que no sentía en años le envolvió, aquella era su familia.
-¿En verdad es nuestra bebé?
- Si, lo es-ella lo miró con cautela.
-¿Y es una niña?- dijo
-Si.
-Gracias. Ni siquiera se como expresar lo que siento. Amo el hecho de que vamos a tener una niña, tu ya y mía.
Ella lo miró sonriendo, aquello disipaba sus dudas anteriores.
- Es nuestra, tuya y mía.
Algo dentro de ella se movió en su interior, al verlos ojos de aquel gran hombre brillosos.
Un gran nudo oprimía su garganta, de cierta forma todo aquello le hizo sentir tan feliz, que fácilmente hubiera podido llorar de felicidad. Era algo indescriptible, aquella era su familia, y haría todo hasta lo imposible para recuperar la mujer que amaba.
Suspiro profundamente.
-¿Qué opinas de ir por una buena comida?
-Me parece genial, muero de hambre.
-Entonces no se diga más, no puedo dejar que mis nenas pasen hambre.
No tardaron mucho para encontrar un restaurante de comida chatarra.
-Aun sigo pensando que deberías comer algo más sano - murmuró Tayler, viendo la hamburguesa y las papá fritas en el plato de Miriam como si fuese veneno.
-No seas gruñón, no suelo comer esto con frecuencia. Además si quieres preservar la paz entre tu y yo, no te metas con mi comida-dijo seria y luego le regaló una sonrisa encantadora.
Él pobre hombre no tuvo me opción que sonreír.
-¿Quieres algo más?-le preguntó cuando la vio terminarse el postre.
-No, estoy full. Ahora me gustaría descansar un poco.
-Sus deseos son órdenes, guapa.
Pago la cuenta y le ayudó a entrar al auto. Apenas estuvo en el inter, cerró los ojos.Escuchaba la voz de Tayler palotear en el teléfono pero está cada vez se hacía más distante.
Para cuando Tayler terminó de hablar ella ya estaba profundamente dormida.
La miro y la dejo dormir todo el camino de vuelta a casa.
Despertó justo cuándo estaban entrando al garaje.
Él la sostuvo por la cintura al salir del auto y la llevo a su habitación.
-Estarás cómoda aquí.
-Pero...
- Nada de pero.
- Es una locura.
- No lo es. Te advierto que hare todo en cuanto pueda para que me perdones.
-Tayler.
No quería que hiciera nada, el hombre era una bomba de encantó cuando quería. No sabía si podía resistirse a él.
- No jugaré limpió-le advirtió, mirándola con sensualidad.
- No puedes pretender que haga como si nada hubiera pasado.
- No te pido eso, sólo dame un voto de confianza.
Ese era el problema, que no sabía si era capaz de confiar en él nuevamente.
- Lo intentaré.
-Con eso me vasta, por ahora-dijo complacido.
Tenía algo en mente y lo llevaría a cabo.
Este capítulo está dedicado con mucho cariño a @JulianaAndrea16 , espero lo disfrute y gracias a todos por su apoyó, me hace mucha ilusión.
Espero seguir mejorando y ojalá algún día pueda publicar uno de mis libros en papel. Se que aún me falta mucho por mejorar.
Quería publicar antes, pero tuve problema con la aplicación.
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Entre un amor del pasado.(2- Serie magnates apasionados)
RomanceSu jefe Tayler ,era todo lo que una mujer podría desear eso, cuando no estaba gritando y de mal humor. Apesar de la frialdad que le caracterizaba . Miriam se enamoró de él nada más verlo. Después de un viaje de negocios ,que terminó en placer ,su...