Valide-i Muazzama Kösem

Kavgalar/Peleas

2 de septiembre de 1643

—¿Por qué, Sultana? —me preguntó Hümaşah enojada.

—Cuida tu forma de hablar —la amenacé.

—Perdón —se disculpó —Pero entiéndame, Kasim está con otra, tiene una favorita.

—Compórtate, Hümaşah. Kasim tendrá más favoritas y no puedes hacer nada.

Ella me miró con odio.

—Además, estás embarazada —dije mirando su vientre de ocho meses. —Él no te puede tocar.

—Sé que lo hace porque no le agrado. No tiene porque decir otra cosa.

La miré harta. Cada vez menos soportaba a mis nueras.

—Es cierto, no me agradas, sin embargo, no es por eso que Esmahan Hatun está con mi hijo.

—Sí algún día me llego a convertir en Valide, trataré a todas mis nueras por igual.

—Con esa actitud dudo que cumplas tu objetivo. Eres impulsiva y una mujer impulsiva no sobrevive al imperio otomano —le dije con seriedad para después irme.

Con enojo, caminé hasta llega al jardín donde se encontraba Meleksima y Gülbahar, esta última se fue antes de notar mi presencia.

—Meleksima —saludé.

—Sultana —dijo sonriendo mientras hacía reverencia.

—¿A qué se debe tu brillo?

Ella volvió a sonreír.

—Le tengo una buena noticia, Sultana.

—Habla.

—Llevo en mi vientre a otro miembro de la dinastía otomana —me avisó.

Sonreí. Iba a tener otros tres nietos. La familia crecía y eso me hacía muy feliz.

—Felicidades, Meleksima —dije acercándome más a ella —¿Mi hijo ya lo sabe?

—No —respondió. —Se la pasa mucho con Esmahan Hatun que ya no me pone atención.