Acı çekmek/Sufrir

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29 de marzo de 1644

—¡Ya me harté! —le gritó Mahienver a Meleksima quien estaba sentada encima de unos cojines en el harem. —Deja a Özlem en paz.

—¡Cállate! —le gritó Meleksima a Mahienver.

—¡Cállate tú! —le gritó Ayşe, şehaseki de Murad. —Estoy harta de que todos te vean como la buena, sólo Özlem, Mahienver, Fatmagül, Gevherhan y yo vemos tu maldad pero, eso pronto se terminará.

 —Estoy harta de que todos te vean como la buena, sólo Özlem, Mahienver, Fatmagül, Gevherhan y yo vemos tu maldad pero, eso pronto se terminará

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Meleksima rió.

—¿Por qué se defienden tanto? Todas son enemigas.

—Porque tenemos una meta en común; deshacernos de ti —respondió Mahienver.

—Digan lo que quieran, pronto volverán a llorar —amenazó para después irse.

Ayşe, cansada, se sentó en un sillón. Le hartaba mucho la aptitud de Meleksima y su paciencia estaba llegando a su fin.

—No la soporto.

—Yo menos —dijo Özlem.

—Tú no eres amante de ningún şehzade muerto, eres el único amor de un şehzade inocente, un şehzade que murió por culpa de la ambición. Eres el amor del şehzade Mehmed —le dio ánimos Ayşe.

—No dejes que ella te atormente —dijo Mahienver.

Poco a poco una nueva alianza se estaba formando mientras, una tragedia para una Sultana estaba por llegar.

—¡Ah! —se quejó Hafsa Sultan para después tapar su boca con su mano. Las nauseas la habían invadido.

—¿Otra vez? —le preguntó su hermana Hasret

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—¿Otra vez? —le preguntó su hermana Hasret.

—Sí —respondió preocupada.

—¿Le dirás a la abuela?

—Decirme ¿Qué? —preguntó Kösem Sultan apareciendo a su lado. Ellas hicieron reverencia.

—Nada, abuela —respondió Hasfsa, preocupada.

Valide-i Muazzama KösemDonde viven las historias. Descúbrelo ahora