Valide-i Muazzama Kösem

Meleksima/Meleksima

2 de septiembre de 1644

—¿Qué pasó? —preguntó Gülbahar despertando.

—Sultana —la llamó Meryem Hatun, su amiga. —Todo está bien.

—¿Dónde estamos? ¿Qué hacemos en un carruaje? —preguntó sentándose.

—Perdón, el şehzade Mahmud me pidió hacerla beber un té para que durmiera.

—¿Por qué?

—Porque sabía que no estaría de acuerdo en su decisión.

—¿Decisión?

—El şehzade Mahmud le declaró la guerra al Sultan Kasim.

Gülbahar la miró sorprendida. Eso significaba que si Mahmud perdía —cosa segura—, sus hijos podrían pagar las consecuencias.

—Detén el carruaje.

—Sulta...

—¡Hazlo! —le gritó.

—¡Paren! —ordenó la Hatun.

El carruaje se detuvo y con el también el príncipe quien montaba su caballo blanco. Mahmud se bajó de su caballo y se dirigió con su esposa. Ella salió y lo miró enojada.

—¿Estas loco? ¿Por qué lo hiciste? —le preguntó enojada. —¿Qué no piensas en tus hijos? El Sultan fue piadoso al dejarte vivir. Otro te hubiera matado.

—Gülbahar, sé los peligros que corremos pero el trono me pertenece. Debo luchar por el y para eso te necesito a mi lado junto a nuestros hijos.

—¿Quién te metió esa idea? ¿A caso fue Ahmed Paşa? —preguntó refiriéndose a la mano derecha del príncipe.

—No —respondió. —Eso no importa, sólo necesito tu apoyo. Juntos venceremos a mi hermano Kasim.

—No hasta que me digas quién te metió esa idea a tu cabeza.

—Tengo alianzas con una Sultana, ella nos ayudará. Muchos la subestiman pero, es la peor de todas.

—¿Quién?

—Meleksima Sultan.

—¡Mató a tus hijos, Mahmud! ¿Cómo confías en ella?

—Ella no mató a mis hijos, fue Hümaşah.

—¿Cómo estás seguro de su ayuda? Es consorte de Kasim.

—Porque quiere hacer sufrir a Kasim.

—¿Por qué?

—No lo sé pero, confío en ella. Ahora responde. ¿Me ayudarás?

Gülbahar pensó la situación. Nada estaba a su favor, lo sabía, sin embargo, tenía que salvar a sus hijos y esa era la única opción.