Conspiraciones

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CAPITULO XIV

22 de mayo de 1868.

A la mañana siguiente al aparecer los primeros rayos del sol, comencé a abrir los ojos, debo admitir que esa noche dormí como un "bebé", y de solo pensar en esa palabra me hacía recordar que debo tener más cuidado, no solo esa noche desaparecí, sino que también debido a eso, Ezio y Arno se pusieron de acuerdo y arreglaron sus diferencias, Arno se disculpó con él, y Ezio prometió que no diría nada de lo que paso aquella noche, saliendo de mis pensamientos, calcé mis pies con botas, normalmente usaba un vestido para dormir a modo de pijama, noté que Arno no estaba en la pieza así que sin dudarlo me levanté para dirigirme, no hacia abajo, sino hacia la habitación de mi primo, pero para mi sorpresa él no estaba, supuse que estaría en el comedor, pero al bajar solo vi a Edward junto con Jacob, el resto ya se había marchado.

A la mañana siguiente al aparecer los primeros rayos del sol, comencé a abrir los ojos, debo admitir que esa noche dormí como un "bebé", y de solo pensar en esa palabra me hacía recordar que debo tener más cuidado, no solo esa noche desaparecí, si...

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-Hola Edward, ¿tan temprano levantados? -.

- ¿Temprano? Pero si son la 13:20-.

- ¿En serio... tanto dormí? -. Decía frotándome la cabeza.

-Parece que a Arno le dio pena despertarte-. Decía Jacob con un toque juguetón.

Edward volteó a verlo con una cara que reflejaba seriedad, al parecer no le causó mucha gracia. -sobre eso, tenemos que hablar princesa-.

Un poco nerviosa respondí -ah sí... Bueno, pero ¿no podría ser en otro momento? Es que recién me levanto y quiero por lo menos ir al baño-.

-Por supuesto mi niña-.

Sonreí sutilmente -hablando de él ¿en dónde está?-.

-Salió-.

- ¿Salió así sin más con esa herida? Ayer ni se podía parar ¿A dónde se fue?-.

-Dijo que tenía que atender unos asuntos pendientes-.

-No me digas que otra vez va a ir a buscar a Elise-.

-No dijo específicamente si iba a ir a buscar a alguien o algo...-.

-O a un templario-. Dije.

-O asesino-.

-¿Por qué asesino?-.

-Evie me dijo que Federico está trabajando para nosotros, yo pensé que se había asociado con la orden templaria con otros fines, pero después de que me enteré que era hermano de Ezio mis teorías se disolvieron como las burbujas del champagne-.

- ¿Y por qué Arno iría a buscar a Federico? -.

-No lo sé, ayer desapareciste y sin embargo fue él el que te trajo hasta acá... ¿tú por qué pensas que saldría? -.

-Es lo que no sé, y me tiene bastante preocupada-.

-Tranquila, no le va a pasar nada-.

El Grito Del ChimangoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora