18.

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Una nueva arcada se hizo presente pero ya no podía expulsar nada más de su adolorido estómago.

Se puso las manos en el estómago intentando aminorar la fuerza de su abdomen, pues después de más de dos semanas con las terribles náuseas, el dolor físico estaba pasándole una terrible factura.

Wonho le sostenía el cabello de la sudorosa frente y Ruby le acariciaba la espalda mientras los padres de Wonho miraban desde fuera del cuarto de baño.

— ¡Es tu culpa por embarazarlo! Joder que apenas volvieron de la luna de miel y ya me hacen abuela... — Ruby golpeó a Wonho y recibió una mirada molesta de parte de Hyungwon.

El delgado y cansado cuerpo se desplomó en el suelo del baño mirando con seriedad a Ruby, deseando decirle mil cosas pero sin poder decir ninguna por culpa de las nauseas.

Wonho bufó molesto por el comportamiento incoherente de su suegra.

— No seas ridícula Ruby... Hyungwon es un hombre y en el remoto caso de que pudiera embarazarse, lo hubiera hecho hace mucho tiempo, jamás hemos usado protección — miró fijamente a Hyungwon y él asintió en confirmación, cerrando los ojos y sintiéndose muy mareado.

Ruby los miró a ambos fingiendo preocupación.

— Entonces tienes SIDA — rápidamente las miradas de la joven pareja y de la pareja de ancianos se posaron en ella con sorpresa y molestia, entonces al ver sus reacciones ella se rió — ¿Qué? ¿Ya no se puede bromear?

Hyungwon suspiró y una nueva arcada se hizo presente y se apoyó en el inodoro para poder seguir vomitando.

Wonho miró con molestia a Ruby.

— No es tiempo de bromas de mal gusto Ruby, Hyungwon está muy mal, no quiere ir al hospital y luego vienes tú a decir que tiene una enfermedad terminal jodidamente contagiosa o que tiene síntomas de embarazo, no me jodas— bufó molesto mientras ayudaba a Hyungwon a ponerse de pie para que se lavara la boca.

Ruby suspiró con resignación y salió del cuarto de baño.

— Quizá Ruby tiene razón — la voz de la madre de Wonho irrumpió en el lugar sorprendiendo a todos.

Hubo un silencio de varios segundos y luego ambos salieron del cuarto de baño muy confusos.

— Disculpa... ¿Qué? — Wonho miró a su madre, estupefacto.

Hyungwon se quedó parado, apoyado en la pared que tenía detrás mirando a su suegra muy asustado.

La mujer parecía estar seria y todos la miraban con una mezcla de susto y confusión.

— ¿Van a ser padres? — Paseó su mirada entre ambos jóvenes y finalmente la detuvo en Wonho.

— Mamá... No vas a creer la tontería de Ruby ¿O sí? — Wonho sonrió un poco nervioso pero así de rápido como su sonrisa llegó, así se esfumó al ver que su madre no decía nada y mantenía un semblante inescrutable

— No has respondido a mi pregunta... — la mujer se cruzó de brazos, entonces en ese momento Ruby se metió en medio de ambos levantando los brazos.

— A ver, a ver... No hace falta que nos pongamos tensos, es decir ¿saben que un hombre expulsa cerca de 400 millones de espermatozoides en cada orgasmo? Puede ser que alguno de ellos... — Ruby hizo una curva sobre el abdomen de Hyungwon y volvió a recibir malas miradas de parte de la joven pareja.

Hyungwon apartó la mano de la mujer y le habló con seriedad.

— La puta madre Ruby, eso es imposible, no te hagas ilusiones... — la mujer levantó sus manos resignada.

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