»PRIMERA TEMPORADA«
Acompaña a María José Garzón (Poche) de 21 años, a esta nueva experiencia de su vida, descubriendose a ella misma después de una relación fallida que duró 1 año, todo se torna raro y confuso cuando conoce a Daniela Calle de 22 añ...
Caro había sido muy inteligente con su verdad y reto, pero sabía la razón por la cual lo hacía, ella bien sabía que Calle me eligiría, ya que somos más unidas que con otras personas.
Calle eligio Reto, que al final de cuentas resultaba el mismo cuál fuera que eligiera, terminaríamos besándonos y no es que me molestara, al contrario, moría de ganas de hacerlo, ya había pasado tiempo de la última vez que por poco nos besamos, y creo que está vez no hay vuelta atrás. Mis nervios estaban al topé, mis manos sudaban, sentía mi respiración entrecortada y me hacía falta, moría de ganas por sentir sus suabes labios en los míos, me inoptisaban esos ojos avellana que en estos momentos jugaban conmigo ya que me veían perdidamente a los ojos y luego se enfocaban en mis labios, fuimos acercándonos poco a poco, perdimos cada centímetro que nos separaba, una de sus manos se posó en mi cintura jalandome más hacía ella, y la otra tomando mi rostro, no podía evitar mirarla con un brillo en mis ojos, en verdad estaba cayendo por Calle, pase ambas manos sobre su cuello formando un agarre, cerramos ambas los ojos, nos quedamos unos segundos con nuestras narices encontradas, sentíamos nuestra respiración cerca, ya no aguantaba más estar escasamente separada de ella, jale de su cuello delicadamente y...
La besé, nos besamos... Dentro de mi sentía como se apoderaba una corriente eléctrica, que recorría cada parte de mi, sentía como nuestras almas eran una, como hacíamos honor a nuestro nuevo Shipeo #Caché, todo dentro de mi se movía, sentía muchas cosquillas, sentía adrenalina, paz, tranquilidad, sentía como ambas ya deseábamos esto, ahora más que nunca sabía que ambas nacimos para estar juntas... Quería quedarme así para siempre con ella, con MI CALLE...
Calle:
Mis latidos estaban a mil por hora, sentía morir, y qué más daba si moría hoy, moriría feliz porque por fin pude sentir de cierta forma a Poché, por fin pude tener el placer de degustar ese sabor dulce que emanaban sus labios melocotón, por fin era mía y en ese momento solo éramos ella y yo, ya no me importaba nadie más, más que mi peliazulada, yo y este perfecto momento que estábamos viviendo, ese momento era magia... Nuestros labios danzaban con frenesí, era ese tipo de beso que dabas con corazón y alma, ese besó que te hace sentir llena, llena de vida, llena de alegría, llena de luz y amor, ninguna podía separarse, no lo deseábamos, podría besar toda la vida esa linda boquita, podría quedarme con ella mil vidas más, Poché con fuerza tomó mi rostro y mordió mi labio inferior, yo solo sonreí ante esta acción, nos separamos por falta de aire, pero aún estábamos a escasos centímetros, abrimos poco a poco los ojos y nos miramos fijamente la una a la otra, no dijimos nada, no era necesario, solo sonreímos y sentí como mi cara se tornaba rojiza al igual que la suya...
"Parce... Solo era un beso, no que se comieran...","La cosa se puso candente...","Es inevitable negar la magía que tienen entre ustedes...","Caché es real PERRAS...","Ya cojan..."
Poché y yo nos distanciamos y solo reíamos ante los comentarios estúpidos de todos, los chicos aplaudían y chiflaban, yo no podía evitar sonreír ya que este había sido el mejor besó de toda mi vida... Escuchamos como Sebas trajo el humor al momento:
-Saben... Tanto besuqueo me dió calor así es que es hora de una buena mojada...- grito mientras de su espalda sacaba una pistola de agua que seguramente compro en aquella tienda, así mismo Mario haciéndole segunda pero el cargando a Paula arrojandola al agua, Caro decidió brincar al agua antes de que Mario la alcanzará, Juan y Sebas estaban en una pelea de pistolas de agua y Poché y yo solo nos mirábamos fijamente a los ojos, en silencio, hasta que decidió hablar...
-¿Porque yo?- me preguntó mientras acariciaba mi rostro delicadamente, no podía decirle que me gustaba, aún que era más que obvio, pero tampoco podía negarselo - Porque eres la persona a quién más confianza tengo, ¡Dhu!...- le dije mientras hacía voz de bebé... Ella rio y volvió a darme un corto besó en los labios. -¿Segura?- Preguntó de forma pícara. Yo quedé completamente embobada, sonreí. -Muy segura- Quize hacerme la indiferente, pero ella volvió a darme un beso más prolongado, esta vez cuando se quiso separar de este, la detuve tomándola del rostro pegandola aún más a mi... Se separó.
-Pues me parece todo lo contrario Callesita...- Dijo mientras se mordía el labio, lo cual ocasionó algo raro dentro de mí que me incitó a quererla besar de nuevo, justamente cuando tome su rostro y lo acercaba a mi, sentimos como cierta agua a presión caía en nuestro rostro, ambas volteamos a ver, y era el idiota de Sebastián...
- Basta de besos niñas, es hora de un chapuzón...- grito mientras se lanzaba al lago, ambas reímos y nos levantamos del suelo, nos agarramos de las manos y saltamos al agua... Estando bajo el agua Poché me tomo de la cintura y me jalo hacia ella, así uniendo nuestros labios en un beso, después de unos cuantos segundos la tome en mis brazos y nos saque del agua aún besándonos, me separé un poco limpie el exceso de agua que tenía en su rostro de manera dulce...
Hoy es 31 de Octubre, y bien sabemos que nuestra bebé Poché cumple sus 23 primaveras, así es que vayamos a todas nuestras redes sociales y demosle mucho más amor el día de hoy por su cumpleaños
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Felíz cumpleaños Poché, gracias por ser el ejemplo a seguir de muchas personitas, gracias por tus ¿Que hago raro?, gracias por demostrarnos que la vida no es fácil pero la recompensa vale la pena por cada esfuerzo y dedicación que le tengamos, por eseñarnos a luchar y trabajando por lo que queremos y anhelamos, gracias por la forma en que amas a Calle y a los Cachers, gracias por ser Tú...❤️
