❝ 𝐁𝐄𝐀𝐔𝐓𝐈𝐅𝐔𝐋 𝐁𝐎𝐘 ❞ | 𝒉𝒊𝒅𝒅𝒍𝒆𝒔𝒘𝒐𝒓𝒕𝒉/𝒕𝒉𝒐𝒓𝒌𝒊 𝑨𝑼

𝐈

࿐◞ ﾟ.*･｡ﾟ
(1949)

Mi pequeño era único. Era poseedor de los ojos más hermosos, la piel más pura y la más brillante de las sonrisas. Los días que pasé junto a él fueron los más felices, y sé con certeza que nunca podré arrepentirme de todo lo que pasé para poder estar con él sin que nadie nos pudiera juzgar. Era perfecto, y nadie jamás lo entendería. Nadie.

Siempre radiante, mucho más que el sol. Amante del Rock n' roll como nadie en la ciudad—cabe mencionar que era un gran bailarín—y nunca, pero nunca podía quedarse quieto. Me seguía por toda la casa, tarareando, bailando o incluso hablando solo.

Y cuando no estábamos juntos, se encerraba en su habitación para leer las revistas de su madre—las cuales robaba constantemente—o a ignorarme cuando se molestaba por no cumplir con algún capricho suyo.

Todo un ángel.

Nuestra historia inicia en el verano del año 1949, cuando todavía vivía en Australia, donde era profesor de literatura. Ya era todo un adulto, con mis treinta años recién cumplidos, me había convertido en el hombre de la casa. No puedo quejarme, pertenecí a una buena familia con una buena casa y una buena vida.

Mi padre, durante las casi seis décadas que vivió, fue un hombre estricto, duro y responsable, eso era lo que más destacaba de él. Amante de su familia y de las caras botellas de vino que acostumbraba a coleccionar, debo reconocer que tenía buen gusto.

Mi madre—también difunta—por otro lado, fue la portadora de calidez y amor en mi juventud. Provenía de una descendencia noruega, lo que acreditaba sus bellas facciones tan europeas. Enfermó de cáncer cuando yo estaba por cumplir la mayoría de edad y falleció en una madrugada de julio, llevándose así la alegría de mi corta vida.

También tuve un hermano menor, mi pequeño Balder. Sin embargo, la muerte fue cruel y se lo llevó a él también, pero mucho antes que a mi madre, siendo precisos a sus cuatro cortos años de edad debido al tifus.

Durante mi juventud fuimos muy cercanos a una pareja de británicos, los Laufeyson. Laufey y Farbauti Laufeyson tenían alrededor de unos treinta años, habían contraído matrimonio recientemente y se instalaron en la elegante ciudad de Londres.

Al cabo de un tiempo, Laufey, tuvo que dejar a su esposa para viajar a Australia e instalarse en una de las tantas habitaciones de nuestro humilde hogar, ya que mi padre le ofreció un buen empleo en el negocio familiar.

No pasó mucho para que llegara la noticia de que Farbauti estaba en cinta, por ello, Laufey tuvo que regresar a Londres para poder cuidar de ella mientras esperaban al bebé, sin embargo el avión que lo transportaba tuvo complicaciones, haciendo que él junto a un par de pasajeros más fallecieran en el accidente, dejando a Farbauti viuda y a Loki, quien nació ocho meses después, huérfano de padre.