The Infection

Capítulo 15 - Amigos, enemigos, y familia

Corrimos hacia la entrada. Vimos entonces que los guardias habían caído de sus torretas. Yacían lastimados en el piso.

-¿Están bien? -Les pregunté a los guardias mientras les ayudaba a incorporarse-. Vayan con Jonan, él los atenderá. –Afirmé-.

Subí a uno de las torretas, y pude ver quién había provocado eso. Era un hombre, de aspecto raro. Vestía completo de negro. -Se metieron en problemas, sabemos que fue de aquí que mataron a dos de mis hombres. Y, si no lo recuerdan, les refresco la memoria. Fue en un mini market. Verán, eran de mis hombres, y ustedes al matarlos se metieron en tierras prohibídas. –Exclamó en tono de sarcasmo y rabia-.

-¿Y qué se supone que hagamos? -Dije yo, queriendo sonar también sarcástico-.

-Creo que tengo algo que les pertenece. Tenemos a... ¿Cómo era?, ah, sí. Philip. –Dijo sonriendo-. Lo mataremos, no tenemos reparo en eso, pero no lo haremos a menos de que nos den todo lo que consiguieron en el market, y además de eso tendrán que darnos este lugar. No diré más. Tienen 72 horas. -Dijo el hombre, y se fue-.

-¿Lo conoces? -Le pregunté a Briana, quien también estaba arriba conmigo-.

-No miente, ellos tienen a Philip. -Dijo ella- Esos bastardos hijos de puta lo tienen. –Afirmó nuevamente ella, bajando de la torreta-.

Lo hablé con la comunidad, y con las pocas personas que éramos no teníamos cómo pelear. Adelantamos los trabajos de reconstrucción como única opción. Se llegó la noche y aún trabajábamos, el lugar ya casi estaba listo, nuestro nuevo hogar, por el cual lucharíamos.

-Oye, ¿Y es que no piensan hacer nada? –Preguntó enojada Briana a Laura-.

-¿Y por qué me alegas a mí?, te recuerdo que no estoy yo a cargo. –Respondió la chica a la defensiva-.

-Hey, Briana, relájate, sé por lo que estás pasando. Philip es mi mejor amigo, así que no dudes cómo me puedo sentir de mal, pero calma, ¿Sí? –Dije al ver la molestia de Laura-.

-Si no hacen algo hoy mismo, iré por él, no saben lo que esos son capaces de hacer... estuve ahí. –Exclamó ya entre lágrimas Briana-.

-Lo estuve pensando, y ya tengo el plan en la cabeza. No irás sola, y te prometo que lo vamos a sacar de allá. –Afirmé con pocas esperanzas, pero dándole aliento a ella-.

Los dormitorios estaban hechos, sólo era cuestión de construir las camas. Esa noche la pasamos en el suelo. Tenía una idea, quizá sería muy útil. Nos comunicaríamos con ellos. Hay un chico en la comunidad al que se le da muy bien el tema tecnológico. Cuando nos comuniquemos con ellos, él los localizaría. Aclaro que, este lugar tiene de todo, sólo era cuestión de mantenimiento. Después de todo, atacaríamos el lugar, o por lo menos sacaríamos a Philip. Nos filtraríamos. Sólo me han visto la cara a mí, y a Briana. Yo no podría ir.
Lo consulté con la comunidad, con los que estábamos al mando.

-Yo voy. -Dijo Max-.

-Yo también voy. -Dijo Riley, mientras miraba a Max-.

Era un poco arriesgado, pero no había de otra. Era de noche, así que cada uno se dirigiría a su respectivo dormitorio. Max con Riley, Laura y yo. Briana estaba en la enfermería, aún se recuperaba. Antes de irnos a dormir, di un aviso a toda la comunidad, en el patio.

-Familia, no tengo nada más por decir que, gracias. El día de hoy fue muy productivo. Poco a poco seremos más personas, más fuertes, y nadie quita que podamos vivir tranquilos, aunque es contradictorio en un mundo así. Gracias... Todos somos uno. –Dije, pareciendo un poco de esos políticos que salen a hacer bulla prometiendo cosas-.