Más allá de las estrellas (Sin editar)

(Cap. 20) Adiós querido cuerpo...

- Ya Celeste, despierta - Dice Joán moviendome bruscamente pero el cansancio no me permite abrir los ojos.

- ¿Qué pa...sa? - Tatamudeo entre sueños.

- Despierta ya, vamos- Insiste y levemente voy despertando.

Más y más pruebas, fue todo lo que viví durante horas. En cada una, una manera distinta de torturarme a mi punto de vista porque incluían dolor físico o emocional. De vez en cuando eran divertidas pero por lo menos cada una me dejaba más exhausta.

Joán me inyectó algo para resistir el ritmo, pero aún con eso se me dificultaba seguir de pie.

Después de tanto trabajo, finalmente terminamos y Joán me llevó a mi cuarto casi a rastras.

- Estoy tan cansada que dormiré por tres días- Mormuro y camino directo a la cama.

- Espera - Se opone Joán. ¿Qué le pasa? Mi sueño no puede esperar.

- ¿Qué? - Réplico molesta y volteo-

- Ven - Pide y extiende su mano.

- ¿A dónde? - Digo sin ganas, el solo me invita con la mirada de nuevo y con una mueca de cansancio acepto.

- Te inyecte demasiadas sustancias y además necesitas recuperarte- Comenta.

- ¿Y...?- Wow, puedo ser muy fastidiosa cuando estoy cansada.

- Solo ven- Caminamos a la piscina con cosa verde, me paro enfrente de ella y solo la veo atontada. Me estoy quedando dormida, es muy dificil mantener los ojos abiertos. Deberían premiarme por lograrlo.

- Entra- Ordena.

-¿Qué?-

- Entra -

Dudo pero la seriedad en su cara me obliga a hacerlo, me siento en la orilla y meto las piernas. La cosa verde es muy espesa y no me da confianza entrar.

Sin embargo pocos segundos después mi cuerpo entra complemente. Es tan espesa que no necesito tocar el suelo porque floto en ella sin hacer el minimo esfuerzo.

- ¿Para qué es? - Pregunto y volteo a ver a Joán.

- Para que te recuperes - Responde con una ligera sonrisa - Debo irme, pasa un buen rato aquí no importa que te excedas. Después duerme, tu gran cambio sera en unas horas-

- ¿Qué? ¿Ya son todas las pruebas?- Mormuro y el levanta una ceja.

- ¿Quieres más, enserio? - Lo miro aterreada y niego con la cabeza - Ya acabamos. Solo faltan unos resultados que en menos de una hora estarán listos. Mientras tanto, solo relajate-

- De acuerdo - Afirmo, el entra a un cilindro y desaparece de mi vista.

Siento pequeños toques en mi cuerpo, es relajante. Mi cuerpo se rinde y me acuesto, relajo la cabeza y dejo de hacer fuerza para acostarme totalmente en la cosa verde.

Nunca he dormido en una cama de agua pero me imagino que así se siente. Estoy tan cansada, de tantas formas que el mismo cansancio me bloquea hasta el pensamiento.

Las ideas ya no caben en mi cabeza, no tengo energía para nada y solo se que dormiré una verdadera eternidad. Mis ojos estan cerrados y mi cuerpo a punto de desvanecerse esta inmóvil.

Después de una tormentosa espera, me quedo dormida y todo se vuelve negro...

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Corría lo más rápido posible pero caí al suelo y mis piernas sangraron, intenté pararme y pese al dolor lo logré, pero no podía correr y solo me quede ahí, de pie con la mirada en el suelo.