Más allá de las estrellas (Sin editar)

( Cap 38) Reencuentro familiar

Disparo con todo lo que tengo en un esfuerzo frutal por detener el avance del enemigo, sin embargo aparentemente tiene una protección similar a la de mi traje pero mucho más inmensa que la del mio, lo que es lógico.

Fuimos creados por la misma tecnología, tenemos las mismas armas y protección pero mi contrincante lo tiene en mayor medida. ¿Cómo puedo vencerlo, entonces?

No hago más preguntas y retrocedo con mis compañeros. Cargo a la niña en los hombros y corremos a lenta velocidad, pues no puedo dejarlos atrás.

Alternamos las calles y corremos por un callejón muy angosto que permanece de pie. Apenas llegamos bajo a la pequeña. Con la respiración acelara, todos permanecen en silencio. Soy yo quien habla.

         - No se muevan de aquí- Ordeno con determinación y salgo.

La criatura se ha marchado, al parecer perdió el interes o encontró otra presa. El descubrimiento me desconcierta, sin embargo decido ignorarlo por el momento.

Aviso a las personas y continuamos caminando procurando no bajar la mirada, no hay caminos libres de partes humanas.

Sin darme cuenta llegamos a una de las calles más devastadas, mi alma cae a mis pies cuando enfrente de nosotros, una enorme bola metálica ocupa el lugar dónde en algún momento existió mi casa.

Caigo de rodillas ante ella. Mi cuerpo se rinde y finalmente después de contenerme, me derrumbo en la angustia y desesperación.

         《 Mi familia 》

         《 ¡Mi familia!》

Grito con el alma desgarrada por el dolor y corro en dirección a mi casa. Puedo observar los escombros debajo de la enorme bola de metal.

          《 Tal vez no estaban adentro》 Me aferro con todo mi ser a mi última esperanza.

Reúno hasta la última gota de fortaleza de mi cuerpo y con una fuerza sobrehumana elevo lentamente el pesado metal del suelo.

Mis músculos se contraen pero no desisten y con mi familia en la mente, la levanto medio metro del suelo.

En otras circunstancias no se su podría hacerlo pero aún con más fuerza inclino la bola metálica a la derecha y con un último esfuerzo, ésta gira a un costado dejando los restos de mi casa al descubierto.

Lo primero que capta mi atención y alimenta mi angustia es sangre. Abundante sangre en el centro de la casa.

Me acerco lo suficiente y busco con desesperación de entre los escombros, escucho acercarse una nueva criatura sin embargo no me importa y continuo con lo mio.

Después de un rato concluyó algo que provoca una cantidad descomunal de paz en mi interior. No hay cuerpos.

Me percato de lo cerca que ahora están las personas que salvé y el miedo en sus miradas me indica lo cerca que también están un par máquinas más. 

Trato de concentrarme, su cercanía no permite que correr sea una opción,  nos atraparian. Y a nuestro al alrededor no hay más que restos de casas donde podríamos escondernos. Pelear podría ser, pero mis posibilidades de victoria son escasas y arriesgadas.

Dentro de mi, surge una idea tan obvia que me siento estúpida por no haberla pensado antes.

Con gran velocidad quito los restos de mi casa, de bajo de donde antes había la escalera, hay una puerta de metal en el suelo. No tiene candado y eso me llena de felicidad, mi familia debe estar abajo.

Esta puerta pretendía ser la entrada al sótano pero los planes fallaron y fue censurada, pues éste se conectaba con las alcantarillas y provocaba un muy mal olor en la casa.