Capítulo 7: Pensamientos + recuerdos

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Poché dejó a la castaña en su casa, pues se había ofrecido en llevarla a esta, y no iba a tomar un "no" tan fácil.

– Gracias por traerme, no era necesario – La castaña le dijo una vez, la peli-azul estacionó el carro al frente de su casa.

– No es por nada, una damita tan hermosa como tú, no debería ir sola por las calles – Está comentó con una sonrisa delicada.

Calle se quedó callada, observando a Poché, una mirada intensa y dudosa, como si estuviera buscando algo.

– ¿Que pasa? ¿Tengo algo en la cara? – Poché comentó, alterando se un poquito.

La castaña asintió con la cabeza, y se inclinó besando la mejilla de la chica – ahí – comentó, dejando ver una marca del lápiz labial donde fue besada.

La peli-azul, al estar con la guardia baja en esos momentos, sonrojó, moviendo su brazo un poco nerviosa, dejando ver la palabra completa. La castaña la notó, pero no comentó nada, solo abrió los ojos sorprendida y se bajó, del auto.

– Nos vemos el viernes – Calle comentó, ya que el jueves no tenía clases con ella.

– Nos vemos – Poché comentó antes de encender el auto, marchandose de la vista de la castaña.

Calle se quedó observando el carro – Su palabra... Serendipia – La chica murmuró, caminando despacio hacia la puerta de su casa, abriéndola y cerrándola detrás de ella – Todo este tiempo... ¿He estado con la persona equivocada? – Está se preguntó mirando los cuadros, que contenían fotos de ella con Sebas – Esto no debe estar pasando –

~ – Eres hermosa – Sebastián comentó observando a la chica, antes de desviar su mirada hacia el móvil.

– Gracias – Calle sonrió, dando una pequeña vuelta, antes de percatarse que Sebas no la estaba observando – ¿Con quién hablas? – Está preguntó levantando una ceja, algo molesta.

– Con nadie, solo veo unos memes que me enviaron – Este ciento hundiendonlos hombros, mientras seguía observando y pulsando su móvil.

– Déjame ver – Calle demandó, a lo que el chico gruño.

– Ya te dije que te vez hermosa, no vengas a montar show, que no hay tarima – el chico comentó con molestia, parándose de la cama  y saliendo de la habitación ~

– Debí darme cuenta que la cosa no era lo mismo – ¿Pero que se supone que haga? Nunca me explicaron que hacer en estas situaciones – Está gruñó, deteniéndose en uno de los espejo, y observándose el pecho, trazando sus dedos en la palabra.

~ – Cada quien, tiene una alma gemela, quien contendrá una palabra en específico, depende a cómo se conozcan – La maestra de secundaria comentó – Está palabra, te aparecerá al rededor de los 10 o 11 años – está continuó explicando – Es como el hilo rojo, cuando naces, naces con alguien ya destinado para encontrarte, lo único que el hilo rojo, nunca se ve, lo nuestro se ve, el problema es encontrar al otro individuo, aunque no es imposible – la maestra se detuvo al ver la mano de Calle alzada – ¿Que sucede Daniela? –

– Acerca de esa historia, yo le pregunté a mi madre ¿Que sucedería si más de dos personas tienen la misma palabra? – Calle preguntó, llamando la atención de varios alumnos, e inclusive de la misma maestra.

– No es algo que haya visto antes en mis años de vida, pero no creo sea algo posible – Está contestó intrigada en la pregunta. ~

Calle suspiro, tirándose en su cama de espalda, observando el techo, dejando salir un suspiro – Al final nadie me la supo contestar – está comentó un poco triste – Joder, no puedo ser la única con este problema – gruño de frustración.

» Tiene más efecto en ti, de lo que lo tiene Sebastián « Calle levantó una ceja, recordando las palabras de la chica, haciendo que está se sonrojara – ¡No homo! – Grito la chica, antes de ser sorprendida por Sebastián, quien había llegado unos minutos atrás y apenas entraba a la habitación.

– ¿y a ti que te pasa? – este preguntó preocupado, observando el extraño comportamiento de la castaña.

– ¿Te acuerdas de mí nueva profesora? ¿La sustituta? – Calle comenzó, pensando en la forma de cómo contarle al chico.

– ¿Con la que peleaste ayer? – Este preguntó, depositando sus cosas encima de su mesita de noche.

– Pues si, hoy me pidio quedarme luego de clases, y tuvimos una conversación – Esta pausó, ya que el chico la interrumpió.

– ¿Que tipo de conversación? – preguntó curioso, y algo molesto.

– Eso no viene al caso, tuvimos una conversación, y se ofreció a traerme, cuando estuvimos aquí, que me dejó al frente, ví su palabra – Está finalizó con suspenso esperando a que el chico  se detuviera.

– ¿Cuál es la palabra? ¿Por qué tanto el suspenso? – Este comentó un poco frustrado.

Está trago hondo, y desvío su mirada hacia el lado – Serendipia –

11:11 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora