11:11

Capítulo 12: No soy fácil

Poché se levantó al otro día, caminando al baño y haciendo sus deberes, una vez finalizó, y se vistió; Una camisa blanca de botones, con un pantalón ajustado color negro, la ropa interior, en color blanco, junto con unas botas del mismo color.

Camino hacia la habitación donde había dejado a Calle, y la observó, viendo que la chica tenía una relajación total. Decidió escribir una carta y marcharse, dejando a la pequeña dormir. Desayuno y tomo sus llaves.

– Hoffman, hazme el favor de cuidarla, preparale un desayuno completo, y procura que se sienta mejor – Poché pidió con una voz autoritaria, pero suave.

– De acuerda, Srt. Garzón – La nombrada se inclinó, alejándose y continuando con lo que hacía.

Poché sonrió, recordando lo hermosa que se veía la chica dormir, mientras se dirigía al auto.

« Me preguntó porque no había decidido transferirme aquí desde antes, la hubiera conocido más temprano, es tan hermosa, que no creo poder resistirme tanto tiempo » Está pensó, observando por el retrovisor mientras daba para atrás con el carro, y entraba a la carretera, saliendo del garaje.

Una vez abandonó su mansión, colocó música, dirigiéndose hacia un Starbucks, donde siempre compraba su café de por las mañanas. Una vez obteniendo la bebida, continuó hacia la escuela, acordándose de la conversación que habían tenido por la noche.

– Sebastián – La chica hizo una mueca – Total no es como si me cayera bien – Rodó los ojos en irritación.

La chica se puso a pensar, que iba a hacer con el chico, pues después de todo, era uno de sus alumnos.

Llegó a la escuela, estacionando el auto, mientras apagaba su auto, y se bajaba unos chicos les gritaron una que otra vulgaridad, a lo que la maestra simplemente les sonrió, al no querer ser expulsada de su puesto.

Camino hacia la oficina, ponchando y caminando a su salón. Al llegar a este, observó que todos estaban sentado, mientras la observaba callados, por los cual le pareció extraño.

– Cuando los estudiantes se quedan así, no traman nada bueno – Comentó recordándose una que otra película que ya había visto.

Adentrándose más a la aula, puto notar, que en la pizarra estaba escrito "Puta" de un lado a otro.

Ella respiró hondo, y sonrió maliciosamente, mientras ponía su café en la mesa.

– Si hubiera sido lista, me hubiera metido a esa y no estuviera soportando sus estupideces – Está comentó algo tranquila, sacando un paquete de papel de su bulto – ¿Ya les había dicho que no soy fácil? – Está preguntó juntando las manos, mientras se recostaba de su escritorio.

Los estudiantes se quedaron callados, pues la risa que se había formado antes, había cesado, al ver que la maestra no tenía una expresión molesta.

– ¿Quien lo hizo? – Poché preguntó simple, observando con lentitud a cada uno de sus alumnos, al ver que ninguno hablaba, tomo los papeles – No han sido mi primer grupo de estudiantes, pero van a ser el primer grupo que tenga un examen y tres ensayos de 300 palabras cada uno, a mano – Está aclaró – En el primer mes de clases – sonrió mientras empezaba a caminar hacia ellos para entregarlos.

– ¡FUE SEBASTIÁN! – Una chica grito, casi tumbando el pupitre al levantarse.

Todos voltearon a verla, con cara de estupefactos, pues jamás sería algo a lo que ellos dirían.

– ¿Que miran? Yo no quiero coger tanto trabajo por culpa de él – Ella protestó, a lo que muchos asintieron, y miraron hacia donde la maestra.

Poché sonrió « Y eso que ya me caes mal, al parecer tenemos el mismo sentimiento » pensó caminando a su escritorio y levantando la paca de papel.

– Está rema estaba en blanco, ni siquiera tengo un examen preparado – Burló antes de llevar su vista hacia Sebastián, quien la amenazaba con sus ojos – Pero tú vas a ir a buscar un cubo con agua y limpiaras eso, además de qué tendrás que hacer cuatro ensayos a mano, para mañana – Está finalizó hundiendo los hombros mientras se daba la vuelta.

– ¡TÚ NO PUEDES HACER ESO! – Sebastián protestó molestó.

– Retame y verás de lo que soy capaz, niño – Está levantó una ceja, tomando su vaso de cabeza – Yo tú, voy buscando el cubo y empiezo a limpiar – Finalizó, viendo como el chico se levantaba y caminaba hacia la salida reprochando.

« Este va a ser el mejor año escolar que eh tenido » Grito con emoción mentalmente, antes de continuar con la clase normal.