Modelo | Joerick

ⅩⅩⅩⅢ

El documental sobre la segunda guerra mundial había terminado al igual que mi helado.

— ¡Angelina más helado de fresa! — Grité desde el sofá.

— Señor Erick, no es saludable...

— ¡Mejor, así me muero más rápido! — Chillé llevando la última cucharada a mí boca.

Tomé el control remoto y empecé a cambiar los canales, pasé por noticias, deportes, cocina y farándula. Me quedé en esté ultimo, parecía interesante, Angelina llega con otro pote de helado.

— El amor... algo muy lindo — Miré molesto al la pantalla plana mientras probaba el helado —. Pero nosotros no somos nadie para hablar de amor... nuestro siguiente invitado nos hablará sobre su nuevo compromiso.

Miré atentamente.

— Joel Pimentel — Quedé atónito al verlo en la televisión.

No sé en que momento mi mano agarró el control remoto y tiró a la pantalla. Miré a Angelina que estaba boca abierta.

— En la lista de compra... — La pantalla estaba rota y de un color extraño —. ¿Puedes poner una televisión de setenta y cinto pulgadas?

Ella solo asintió, al parecer iba a decir algo pero el timbre la interrumpió, me acerqué a la puerta y la abrí.

— Acaba de llegar esto — Me entrego lo que parecía un carta.

Cerré la puerta con la carta en mi mano, la di vuelta y la abrí.

“Joel Pimentel & Alessia Monet”

No necesitaba leer más para saber que era.

La dejé tirada en la pequeña mesa que estaba ahí, algo cayó del sobre, parecía otro papel, me agaché, lo recogí y lo abrí.

“Querido Erick:

No te invito porque quiera de alguna manera dañarte o hacerte sentir mal... eres mi mejor amigo después de todo, y te quiero ahí, en el momento más especial de mi vida.

Yo lamentablemente no pude asistir a tu boda, pero estaría eternamente agradecido y feliz que asistieras.

Con todo mi amor...
         — Joel Pimentel”

Volví a tomar la invitación y busqué donde se haría la boda; California, mi hogar.

Si a él le hace feliz que yo esté ahí, allí estaré.

— ¡Nos vamos a Estados Unidos! — Corrí hacía Angelina

— ¿Nos? Señor Erick... — Dice mientras la abrazo.

— ¡Sí, Angelina! ¡Los dos! — Chillo emocionado.

Allí estaré, en el día más importante de tu vida.