Modelo | Joerick

ⅩⅩⅥ

Tenía todo planeado, pero apenas abrió el ascensor todo se había ido a la mierda.

— ¡Estás no son horas de llegar! ¡¿Dónde andabas?! — Se acerca rápidamente a mí.

— Fui a negociar, ya era demasiado tarde y estaba muy lejos de aquí, pasé la noche en un hotel — Dije simulando estar diciendo la verdad.

— ¿Esperas que te crea?

— Puedes preguntarle a Richard, fue mi chofer y guardaespaldas anoche.

Negó furioso con su cabeza, la comida estaba lista, fui al comedor y estaba Angelina sirviendo la comida.

Me senté y Ethan hizo lo mismo, no paraba de intimidarme con la mirada, no lo iba negar le tenía demasiado miedo, pero colmó mi paciencia.

— ¡Prometiste cambiar y sigues siendo la misma mierda de antes! ¡Deja de controlarme! — Grité poniendo mis manos en la mesa.

Angelina se asustó haciendo caer las copas, no le di importancia, sólo quería gritar y gritar.

— ¡Cómo quieres que no esté tranquilo ahora que sé Pimentel trabaja contigo!

— ¡¿Qué tiene que ver eso?! ¡¿Crees que le ando rogando?! — Pude ver como Angelina tapaba con sus manos sus oídos —. Estoy casado ¡maldita sea! — Respiré profundo —. Te amo ¿sí?

Pasaron menos de tres segundos y Ethan estaba llorando.

— Lo siento tanto — Dice tapándose la cara — No debí tratarte así.

— Lo siento también yo — Me acercó a él con la intensión de abrazarlo.

Me sentó en sus piernas, quedé a centímetros de su rostro viendo sus lágrimas caer.

— Iremos al centro de adopción y tendremos un hijo, y si quieres más, lo que tú quieras mi amor.

Sonreí y me acerqué más para besarlo, el sonido de nuestras bocas siendo unidas invadía la casa.

Me sentía sucio después de haber dormido en los brazos de Joel.

Estábamos de camino a la habitación, quitando toda la ropa que teníamos.

Ya era rutina terminar en la cama cada vez que peleábamos.