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La cocina era muy poco espacio que explorar, así que me la llevé a la cama y me la follé duro y suave,mientras ella sólo gemía de placer.Le sostuve las manos por encima de su cabeza para que no me hiciera daño con sus uñas.

---Ian...

---No digas mi nombre.Tendré que castigarte por eso.

Sonrió y la besé.Estaba llegando al orgasmo, y yo en cualquier momento llegaría.

---Vamos,córrete conmigo...

Gritó de placer cuando mis embestidas aumentaron.

---Te gusta?

Asintió mientras gemía y me miraba a los ojos,arqueó la espalda y al entrelazar mis manos con las suyas las apretó.Se corrió primero y segundos después me corrí fuera de ella.

Quedó encima de mí y me besó,la penetré y luego la ayudé a mover sus caderas.

---Más rápido.

Me negó con una condenada sonrisa en su hermoso rostro.No lo estaba haciendo nada mal.Subía y bajaba y todo estaba sincronizado,subir bajar,subir bajar, pero se detuvo arriba, la miré y se dejó caer dejando a mi amigo completamente dentro de ella.Eso si que me iba a matar,sé que las diosas no existen,pero ella es una diosa.Iba a correrme nuevamente,ella estaba provocando muchas cosas nuevas en mí.

---Ian...

Sus uñas se clavaron en mi espalda y me arañó, no me importó pero la embestí ,hasta que gritaba para que me detuviera,pero no lo hice,no me detuve.Cada una era más dolorosa que la anterior,incluso para mí lo eran.

---Detente...

---Te dije que no dijeras mi nombre.

Le apreté uno de sus firmes y llenos pechos y luego se lo mordí mientras ella gritaba para que me detuviera.

---Duele...

La besé y le bajé el ritmo a mis embestidas.

Lexi.

No sabía que decir su nombre implicaba tanto placer y dolor,no niego que me ha gustado.Pero he sentido dolor.

Luego de recuperar nuestras respiraciones se agachó frente a mí y me separó las piernas para colocarse entre ellas.

---Cielos!

Su lengua estaba en mi coño,virgen santa!

Apreté las sábanas y él continuó con lo suyo.Mordió mi clítoris y automáticamente cerré las piernas, pero él me las abrió nuevamente.

Volvió a introducir su lengua y a morderme,era excitante.Me besó le aparté el cabello del rostro.

Se dejó caer a mi lado y gruñó antes de sonreír.

---Gracias.

---Por qué?

---Por darme placer---dijo

Los dos sonreímos y luego de ponerse su boxer abrió sus brazos.

---Ven aquí.

Me acerqué a él y me recosté encima su pecho.

---Quiero un piercing ---dijo mirándome a los ojos.

---Dónde?

---En tu coño.

---Qué?

---Se vería sexy.

---No me pondré un piercing en mi coño.

---Ni para satisfacer a tu esposo?

---Te pondrías uno para satisfacerme?

---No.

---Pues ahí tienes tu respuesta.

Sonrió y pellizcó mi mejilla antes de apartar mi cabello de mi rostro.

---Vamos,duerme---dijo acariciando mi espalda.

.....

Hasta el último suspiro Donde viven las historias. Descúbrelo ahora