Mareas Misteriosas {#Libro 1} [EDITANDO]

Capítulo 45: Fuego

Narra Ambre

Habían pasado cinco días desde la llegada de William... Mariam y él se habían vuelto inseparables aunque ella aún no le había contado que él era su vinculado. William hacia como si no supiera nada, esperando a que ella al final se animase y se lo contara.

El aquelarre amazónico llegó al día siguiente de él. Me impresionaba mucho el don de Zafrina para meter diferentes imagenes en tu cabeza. Nessie estaba muy apegada a ellas y yo por mi parte había entablado una gran amistad tambien.

Por desgracia no me podía librar de las clases. Me encontraba en clase de Calculo junto con Helena y Layla. A las tres nos tocaba juntas esa clase. Mire el reloj, parecía que se hubiera detenido el tiempo. Teníamos examen y como a mi se me daba bien Cálculo lo había acabado rápido, pero esperar era una tortura.

Las agujas parecian que iban a camara lenta. Mire hacia la ventana, parecia que hoy tambien seria un día lluvioso. En ese momento senti una ola de calor que inundaba todo mi cuerpo, como si le ubieran prendido fuego. Me removi en la silla sin entender que me pasaba, cogi un papel y empece a avanicarme sin importar las miradas que me echaban algunos. De la forma tan repentina como me había venido, el ardor desaparecio.

Desconcertada por lo que me había pasado me dirigi a la siguiente clase. Entre sin musitar palabra. Me tocaba Biologia con Danielle, me sente a su lado y esta me miro preocupadas.

--- ¿Estas bien? Te noto rara. -pregunto.

--- Sí, no es nada. -dije con una leve sonrisa. Ella fruncio el ceño pero miro para delante sin seguir insistiendo.

En toda la hora no volvio a pasar nada como antes. Las siguientes horas transcurrieron igual, sin complicaciones.

Mientras corria por la pista de Atletismo el sofocon volvio. Tube que parar para descansar. Me remangue la camisa por encima de la cintura permitiendo que se viera mi plano vientre. El calor era demasiado fuerte. El viento que había no era suficiente para calmarlo. Me percate de la miradas de algunos alumnos que pasaban cerca, me limite a ignorarlas. Y de nuevo de la misma forma que aparecio se marcho. Demonios, que me estaba pasando. Es que me estaba volviendo loca.

El día transcurrio igual. Embry vino a buscar a Danielle para llevarsela a La Push y al plan se sumo Mariam. Jacob me llevo a casa, después de las cosas más raras que me había pasado hoy no queria tentar a la suerte. Nos quedamis en mi habitacion toda la tarde. Charlando de cosas vanales, le conte lo de la vinculacion de Mariam y la advertencia que le había dado a Will.

--- Uh. No me gustaria estar en su piel si hace daño a Mariam. -dijo Jake con una sonrisa burlona.

--- No lo hara. En estos dias me he dado cuenta de que le gusta de verdad. -dije convencida.

--- ¿En tan poco tiempo? -pregunto arqueando una ceja.

--- Le conozco demasiado bien. Creeme Will es un mujeriego pero Mariam es la primera chica que le gusta de verdad y ara todo lo posible para que no sufra por nada.

--- Bueno el tiempo dira si estan destinados a estar juntos o no. -dijo arrimandose a mi. Estabamos tumbados en la cama boca arriba. Me lo quede mirando, como alguien puede ser tan perfecto. Llevaba una camisa de cuadros roja y unos pantalines largos baqueros. Como puede ser alguien tan sexy y no haber castigo por ello. Dios si no estuvieran abajo un monton de vampiros me lanzaria encima suyo sin pensarlo.

Fue en ese momento cuando me percate de que su olor me resultaba más fuerte y atrallente que normalmente. Genial, si ya de por si me costaba controlarme ahora le sumamos eso.

Después de cenar, él tubo que marcharse a patrullar y yo me fui a la cama.

Me canvie y me puse un pijama de algodon muy comodo y fresco.

A media noche me desperte. El mismo calor de antes inundaba mi cuerpo, pero era más intenso. Ahora parecia fuego más bien que calor. Me duche con agua fria para ver si lograba quitarmelo de encima pero de nada sirvio. Abri las ventanas y espere a que el aire inundara mi habitacion. Por desgracia no estaba en mi direccion y no me llegaba ni pizca. Un portazo se escucho.

--- ¿Chucho que haces aqui? -pregunto enfadada Rosalie. Jacob paso de ella y se dirigio a mi habitacion con paso firme. Me quede sentada en la cama estrañada. Entonces entro por la puerta cerrandola a su espalda y dejando a Rosalie con la palabra en la boca. Se inclino sobre mi y me empezo a besar con fiereza.

En cuanto me percate de su efluvio mis sentido se alteraron y el fuego se convirtio en laba ardiente. Lo tire a la cama, poniendome encima de él con una pierna a cada lado de su cintura. Esta vez fui yo la que empece a besarle salvajemente. Me retire el pelo de la cara y me lo puse a un lado. Con las manos empece a desabrochar los botones de su camisa, sin pensarmelo dos veces.

--- Aqui no -murmuro consiguiendo despegarse de mis labios.

Por una milesima de segundo me volvio la cordura. Me levante de encima suyo y lo cogi para que se levantara y me siguiera. Sabia exactamente lo que me estaba pasando pero por desgracia no me podia resistir. Salimos de la habitacion y me encontre con una Rosalie la mar de sorprendida. Alice tambien estaba alli con la boca abierta. Baje las escaleras a toda prisa y sali por la puerta. La tormenta estallaria en cualquier momento.

Jacob se transformo nada más salir. Me subi a su lomo y mire hacia la casa.

--- Ambre, ¿donde vas a estas horas? -pregunto Rosalie muy enfadada, parecia que fuera a salirle humo por las orejas. No me dio tiempo a responder, Jacob empezo a correr a toda velocidad hacia el bosque.

Me agache para que las ramas no me dieran en la cara. A medida que corria empezo a diluviar. Aumento la velocidad. En un momento nos encontrabamos en la montaña, en la entrada de una cueva. Me baje de su lomo y espere a que tomara su forma humana para continuar lo que habiamos empezado en mi cama.