Mareas Misteriosas {#Libro 1} [EDITANDO]

Capítulo 50: Camino

Después de pasarnos toda la mañana corriendo paramos para comer algo. Mi padre y William llevaban mochilas con comida enlatada para las chicas y para mi. Los lobos no la necesitaban ya que cazarian. Las dos manadas se dispersaron para ir a por un vocado. Me sente junto a Danielle, Sophie y Mery. Mariam se sento con Will.

Me sorprendia la paciencia que este estaba teniendo. Normalmente ya se habria lanzado, se notaba que realmente la queria. Pero sabia que su absteniencia no duraria mucho más. Pronto le pasaria a Mariam lo que a mi, la semana pasada.

Sonrei al verlos tan acaramelados. Ya faltaba poco."Quien lo iba a decir, Mariam mi cuñada". Rei por lo bajini al pensarlo.

--- Mariam y Will se llevan muy bien. -dijo picaramente Danielle.

--- Si, quien lo diria. Mi hermano enamorado -rei de nuevo.

--- Hay el amor... Aveces surge de la manera que menos imaginamos -dijo Mery.

--- Cambiando de tema, ¿como te van las barreras? -pregunte a Mery.

--- Genial. Ya podria caer una bomba nuclear que no me harian ni un rasguño. -dijo toda orgullosa. La verdad es que tenia motivos para estarlo, su comentario no era para nada una exageración. Danielle se fue junto a su lobo sin prestar atencion a nuestra conversacion.

--- Bien porque tengo una mision especial para ti -dije tan bajo que apenas pudo oirlo Mery. Me acerque tanto que casi le hablava en el oido.

--- ¿De qué se trata? -pregunto Mery en el mismo tono. No queria que nadie se enterara de esto.

--- Esta es mi primera orden como Reina. -Mery me miró más atenta que nunca. Jamás se me había pasado por la cabeza hacer una cosa así, pero esto era demasiado importante.- Estate atenta porque es muy importante. -por primera vez hable como una autentica Reina.

--- Hare lo que me pidais, mi Señora -dijo Mery. Se había dado cuenta de que ya no le hablava la sirena Ambre, sino la Reina Iliana.

--- Durante la batalla comcentrate en proteger a Danielle. -dije la mar de seria. El don de Danielle era muy poderoso. Teniendola a ella no tendrian peligro de perder a Atlanta en la guerra, ya que la podrian resucitar. Harían lo que fuera por conseguirla.

--- ¿Qué? -me miraba sorprendida y desconcertada.

--- Las sirenas haran lo que sea para capturarla. No puedo dejarla desprotegida, tu eres mi unica opcion. -su mirada se endirecio. Era joven pero muy madura, sabia que podia confiar en ella- Tus escudos son impenetrables, eres la unica que la puede proteger.

--- ¿Serian capaces de obligarla ha utilizar su don? -me pregunto.

--- Eso no lo dudes -no permitiria que tocaran a mi hermana.

--- Mi Reina, cumplire con la mision aun a costa de mi vida -juro. Sonrei y le palme la espalda.

--- No me esperaba menos -ella sonrio tristemente. No había felicidad en la guerra, ni la habria nunca.

La noche se hacercaba y tendriamos que acampar. Benjamin reunió unas cuantas ramas y encendio el fuego. Estaba sentada algo alejada, podia ver a la perfeccion como amigos y enemigos entablavan una nueva relacion. Nessie hablando con Sulpicia y Athenodora. Caroline entablando una cordial comberacion con Alec y Jane. Asta Aro se intereso en Will. Bueno eso no era tan raro, si contamos con que ese hombre esta como una cabra. Todos hablando y riendo, una imagen la mar de tierna. Y pensar que nos había unido algo tan horrible y que causaba tantos muertos, como la guerra. Jake se hacerco y me lamió la mano para llamar mi atencion.

--- Hola Cielo, -dije con cariño- siento haberte marginado -le acaricie su suave pelaje. Él se tumbo a mi lado y poso su cabeza en mi regazo. Estaba apollada en un arbol sentada en el suelo humedo.- Que ironico verdad. -le dije mientras seguia acariciandole- La única manera para romper las diferencias, era que ubiera una guerra que nos obligara a aliarnos para defendernos a nosotros mismos y a los que queremos. -Jake gruño confirmando mis palabras. Él jamás trabajaria con vampiros come humanos si no fuera absolutamente necesario.

Le di un beso en el ocico sonriendo. Él me miro en señal de protesta. No le gustaba que le tentara cuando no me podia tocar como él queria. Sonrei y segui acariciandolo.

Me desperte sobresaltada, el mismo sueño que me venia persiguiendo toda la semana. Mire a mi alrededor, había dormido recostada en el cuerpo de mi lobo rojizo. La fogata seguia encendida, seguramente alguno de los vampiros que padecen imsomnio la habria estado alimentando durante la noche. Vivian aprovechaba y calentaba las latas de comida en conserva. Me levante perezosamente, tenia todo el cuerpo entumecido. Jake al sentir mi movimiento abrio los ojos y levanto la cabeza, mirando cada movimiento que hacia.

Me hacerque a donde ella estaba, no habiamos hablado mucho desde su llegada, se había concentrado más en su hija.

--- ¿Cuanto le falta? -pregunte para romper el hielo.

--- Unos minutos. Qué, ya estas tan ambrienta que no puedes aguantar -dijo con una sonrisa complice.

--- Ya me conoces, mi estomago es un pozo sin fondo. -dije siguiendole la broma. Ella rio durante un breve momento y luego me miro con cierto reproche.

--- Mariam me ha contado que la sometiste al ritual. -dijo, la mire durante unos segundos sosteniendole la mirada. Al final fue ella quien la aparto.

--- Es cierto. -dije. Su colera empezo a arder.

--- ¿Por qué? Es joven, podria haber muerto. -se le creo un nudo en la garganta.

--- Fue su decision y la respete -quise zanjar el tema.

--- ¿Entonces si ella quisiera lanzarse por un precipicio la dejarias sin intentar detenerla? -dijo enfadada, no me gustaba el tono que había empezado a tener la conversacion.- Es una niña, no sabe lo que quiere. No puedo creer que estubieras dispuesta a arrebatarle la vida.

--- No Vivian. Mariam ya no es una niña. Todas las aqui presentes hemos vivido tantas cosas que se podria decir que la inocencia de la niñez ya no la tenemos. Es más creo que ninguna la ha tenido nunca. -Vivian se quedo callada de golpe- Pero tu eso no lo ves. Estabas tan obsesionada con mantener con vida a Mariam, que ni te dabas cuenta que haciendolo solo conseguias matarla de una forma más lenta y dolorosa. Dejando que la culpa y el arrepentimiento la undieran en un pozo sin salida. -la furia crecia y se extendia por mi cuerpo como la laba- Yo la saque de ese pozo, la libere del martidio que sufrimos y le di una oportunidad. Asi que no, no le intente arrebatar la vida sino todo lo contrario. Le di la oportunidad de vivir lo que realmente es vida. -Vivian bajo la cabeza admitiendo su culpavilidad.

--- Puede que parezca una mala madre por dejar que mi pequeña pase por eso pero... entiende que es lo unico que me queda de Tomas. No se que haria si la perdiera. -dijo entre sollozos. Mi corazón se rompio ante la imagen. Tomas el vampiro vinculado de Vivian había sido asesinado por otro vampiro una semana después de que ella se quedara embarazada. No llego a saber que iban a tener un hijo.

--- No pienses más en lo que prodria haber pasado. Concentrate en el echo de que la tienes a tu lado y que ahora ella puede tener una vida dentro de lo que cabe normal. -le puse una mano en el hombro para reconfortarla. Vivian alzo la cabeza y sonrio aún con lágrimas en los ojos.