Emrys el Dragón (Traducción)

Cap. 2: El momento de la verdad, parte 1

Merlín se apresura a entrar en las habitaciones de Arturo, sin aliento. —Necesito una audiencia con el Rey. —Jadea.

Arturo levanta la vista de su escritorio, la exasperación se refleja en su rostro. —¿Qué demonios es tan importante que necesitas decirle al Rey?

—Bueno, no yo específicamente, es mi... una mujer, su pueblo está bajo ataque...

Sus cejas se juntan mientras se pone de pie. —¿Bajo ataque?

—Arturo, por favor... —Suplica Merlín.

—Veré lo que puedo hacer. Será mejor que no pierdas mi tiempo.

—Gracias, Arturo. —Sonríe —Iré a buscarla. —Merlín sale corriendo, derribando una silla mientras avanza, aumentando la frustración de Arturo.

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Arturo no está seguro de cómo consiguió que su padre accediera a escuchar a una mujer de la que Arturo no sabía nada, pero está agradecido de haberlo hecho. Rastrea a Merlín hasta los aposentos de Gaius. Las voces se fluyen por el pasillo mientras se acerca.

—Aquí, Hunith, esto debería ayudar con la hinchazón. Aplícalo alrededor del ojo. —Oye decir a Gaius.

—Yo lo haré. —Agrega la voz de Merlín.

Arturo se detiene en la puerta.

—Merlín, puedo hacerlo yo misma. —Dice la mujer, ¿Hunith?

—Madre, déjame...

Arturo levanta las cejas. Rápidamente abre la puerta y dice. —Ah, ahí está, Merlín.

Merlín gira tan rápido que probablemente se dio un latigazo. —¡Arturo! ¿Pudiste-?

—Tienes una audiencia con él a la una.

Merlín sonríe, inclinándose levemente. —Gracias.

—Hunith, ¿verdad? —Pregunta Arturo, apoyándose contra el marco de la puerta.

—Sí, señor —Inclina la cabeza, jugueteando con la tela de su falda.

—Por favor, llámame Arturo. Dime, ¿qué tan difícil fue criar a Merlín? Si se parecía en algo a lo que es ahora de niño, debe haber sido difícil para ti. —Sonríe.

Merlín le lanza una mirada mientras Hunith sonríe insegura. —Oh, fue un pequeño fastidio. Pasé la mayor parte del tiempo corriendo tras él para evitar que se metiera en problemas.

—¡Madre! —Exclama Merlín.

Arturo y Gaius se ríen cuando un ligero rubor se deslizaba sobre el rostro de Merlín.

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—... Los inviernos son duros en Ealdor, y hay muchos niños. Algunos de ellos simplemente no serán lo suficientemente fuertes para sobrevivir. Apenas tenemos suficiente comida, y si Kanen toma nuestra cosecha, nuestros hijos no vivirán para ver otro verano. Por favor, necesitamos tu ayuda —Suplica Hunith al Rey.

Está de pie frente al Rey Uther en el medio de la sala del trono, rodeada de caballeros y miembros de la corte del Rey, así como de Lady Morgana, Guinevere y Merlín. Arturo se mantiene erguido al lado de su padre, prestando toda su atención a Hunith.

—Ealdor está en el reino de Cenred —Respondió Uther sin rodeos, indicándole que se vaya. —Su seguridad es su responsabilidad.

Arturo mira hacia su padre, apenas conteniendo su desaprobación mientras ella continúa hablando.