Capítulo 23

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Las cosas han marchado bien desde que Orihime descubrió mi secreto, ahora ella es parte del diminuto club de personas que lo saben en los que se incluyen Uryu y el Señor Urahara, el conserje de la escuela. ¿Cómo es que él sabe de la historia? Pues tengo que darle las gracias a la Lic. Nelliel, ese día me escape de mis amigos para ver a Ichigo así que fui a su aula y mi sorpresa fue encontrarla ahí con él. Afortunadamente llevaba unas hojas que nos habían entregado a los presidentes de clases y pude justificar mi presencia.

Apenas había comenzado a hablar cuando ella se marcho para dejarnos "trabajar sin distracciones". Sé que en el fondo yo tampoco soy de su agrado pero al menos yo no actúo tan falsa como ella, aunque eso es muy inteligente de su parte pues eso me dejaba a mi como la niña infantil haciendo que me ganara uno de los sermones de Ichigo sobre dejar de ser tan grosera y fuera más amable, pero como mi orgullo se niega a ceder decidí retirarme de ahí antes de comenzar una pelea, pero él malinterpreto mi huída y terminó encerrándonos en el cuarto del conserje, según él en lo que se me pasaba el enojo.

Cuando termine de explicarle que no estaba enojada y que estaba de acuerdo con que me había comportado mal con la Lic. Nelliel él junto sus labios con los míos y me sujeto de la cintura y yo de su cuello, fue entonces cuando la puerta se abrió y vimos a Don Urahara paralizado mirándonos mientras sostenía dos escobas.

Habría jurado que la cara nos explotaría de la vergüenza si él no hubiera bromeado diciendo "Si corren el pasador tendrán mas privacidad" y aunque intentamos explicar se negó a escuchar diciendo:

"Rukia, yo te conozco desde que entraste a la escuela, eres una buena niña pero siempre estabas tristes, sin embargo hora ya no y creo saber la razón, tú debes de ser un gran tipo por hacer sonreír a este angelito. Por mi no deben preocuparse, pero tengan cuidado, su situación no es nada fácil"

Y así fue como se entero de nuestro secreto, y aunque yo moría de la vergüenza cada vez que lo veía él me demostró que sabía guardar un secreto.

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El otoño ya esta aquí tiñendo el cielo de gris lo cuál me encanta pues no soy muy fan del calor y de sudar y por ello prefiero el frió.

Durante el almuerzo me encuentro con Tatsuki y Orihime hablando acerca de los preparativos del evento de aniversario que pronto se llevara a cabo.

—Hablando del evento por el aniversario ¿Adivinen quien me invito a venir con él?— pregunta Tatsuki.

—¿Hisagi?— responde Hime, más que una pregunta suena a una afirmación.

—¡Sí!— suelta en un gritito —¿Y tú con quien vendrás Orihime?

—Oh no yo no podré venir— se lamenta —Esta mañana me dijeron que Sora tendrá un partido fuera de la ciudad y como es la final de la liga de su Universidad, iremos a apoyarlo, me iré el jueves y probablemente regrese el domingo.

Eso me decepciona, pues el sábado es mi tercer mesversario y tenía planeado una cita con Ichigo y esperaba que Orihime pudiera ayudarme ya que mi papá no ha salido de la ciudad desde que regreso de Monterrey, y aunque eso me hace feliz, también limita mi tiempo con Ichigo.

—¿Qué te pasa Rukia? Parece que te afecta mucho el que Orihime no este para el sábado.

—No es eso es que creí que el sábado podría pasar a tu casa desde temprano y venir contigo al evento, pero descuida— respondo.

—Si quieres puedes venir a la mía— ofrece Tatsuki.

—Gracias, pero no, de cualquier forma pensaba que estaría con Hime, y además tú no estarás sola y yo no quiero hacer mal tercio— le digo —Creo que mejor no vendré, igual no soy muy fanática de esas cosas.

Querido Profesor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora