Capítulo 26

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Esa primer semana luego de perder a Jimin, fue la peor de la vida de Min Yoongi.

Le estaba doliendo como nunca. Esos sentimientos eran nuevos para él, la tristeza, el vacío, la sensación de pérdida pero sobre todo el estar solo.

No soportaba estar solo.

Había estado insistiendo a Jimin que le perdonara, que le diera otra oportunidad. Pero el chico ni siquiera quería verlo. Se acercaba a hablarle en la universidad, había ido hasta su casa pero todas las respuestas eran negativas. Lo rechazaba, lo evitaba, sus padres no lo dejaban verlo y nada parecía mejorar.

Se sentía perdido y no sabía cuánto más soportaría así.

Ya ni siquiera estaba enojado con Jungkook por haberlo arruinado todo. Estaba demasiado triste como para sentir otra cosa.

Con el tiempo dejó en paz a Jimin. Creyó que solamente necesitaba eso, tiempo. Quizás cuando no estuviera tan molesto con él podría intentar volver a insistir. Jimin tenía que perdonarlo. Ellos se amaban. Eran el uno para el otro.

Las cosas parecían más calmadas mientras más tiempo pasaba. Taehyung aún seguía sin ver a Jimin fuera de las clases que compartían. Se saludan educadamente pero nada más. Por lo que le había contando Jungkook de la charla que tuvo con su amigo, sabía que solo tenía que esperar. No quería presionarlo ni ser molesto mientras tanto.

No tenía a su amigo pero es que tampoco podía tener a Jungkook.

El menor se veía distante. Todo parecía en orden entre ellos pero el chico ya no se le acercaba como antes. Y la verdad es que lo extrañaba. Los extrañaba mucho a ambos. ¿Por qué todos tenían que estar solos? Le parecía muy injusto.

Pero tampoco quería molestar al menor. No ahora cuando parecía estar mejor que antes. No ahora cuando parecía estar en paz y superando todo lo ocurrido.

Jungkook estaba más enfocado que nunca en sus clases, había estado estudiando, aprobando sus exámenes, y también buscando nuevos empleos pero no había tenido mucha suerte con eso último.

Se sentía bien. Hablar con Jimin de verdad le había quitado un peso de encima. Yoongi no había vuelto a buscarlo y todo parecía marchar bien.

En cuanto a Taehyung...extrañaba pasar tiempo con él, pero aún no se sentía listo. Y como le había prometido a Jimin, no haría nada que pudiera lastimarlo. Hasta que no se volviera a sentir un hombre completo, se había dicho a sí mismo que no se metería en la vida de nadie.

Una tarde de un lunes estaba concentrado leyendo unos apuntes de la universidad mientras esperaba que clientes llegaran a la tienda. Taehyung estaba cerca, trabajando en la computadora.

La verdad es que ambos pretendían que la presencia del otro no les afectaba pero como siempre Taehyung fue el primero en ceder.

- ¿Tienes un examen pronto? - preguntó tratando de sonar de forma casual.

- Sí. Pero ya tengo casi todo estudiado. - Jungkook ni siquiera levantó la vista para mirarlo.

- Que bueno.

Minutos de silencio incómodos otra vez. Decidió intentar con otra cosa.

- Oye...¿qué opinas sobre que mi hermano y Seokjin anden besándose por ahí? Desde que Nam se animó a hacerlo no han parado.

- Me parece bien. - respondió Jungkook. - Aunque no han salido mucho más.

- Bueno cuando no hay tiempo, hay que aprovechar los pocos minutos disponibles para hacer algo interesante ¿no crees? - le sonrió y qué lindo fue cuando Jungkook finalmente lo miró y le sonrió de vuelta.

La Segunda Vez - VkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora