Donghyuck no es conocido por ser un chico tierno, de hecho es aterrador.
Una vez, atacó a un policía que estaba chequeando a Mark. También se hizo una credencial falsa y entró a un pub cerca de las dos de la mañana, un hombre le dio un cigarrillo con su número en él y se metió en una pelea entre borrachos que querían su mano. Al igual que esa canción de su artista favorita, Lana del Rey.
Se preguntarán dónde están sus padres, Mark lo hace todo el tiempo, pero ellos están allí. Nada más que no lo pueden controlar así que lo dejan ser, tienen una voluntad escasa.
Por todo esto, lo que acaba de encontrar en medio de una caminata por las dunas no debería ser la gran cosa.
Un chico del otro curso, Lucas, se acercó a él con curiosidad.
—Damn it, ¿A quién mataste?— Agarró una mandíbula y le sopló la arena.
—Yo no hice nada, me quise sentar y una costilla me pinchó la retaguardia.
Lucas resopló lo que era un homólogo a una risa para él.
—Te alejaste del grupo y encontraste un cadáver, que conveniente para el raro de la clase.— Donghyuck lo empujó.
—Déjame en paz.
Lucas se le puso de frente. Donghyuck tenía que doblar mucho el cuello hacia atrás para verlo, a pesar de que él esté agachado la diferencia de estaturas era notable.
—Deberíamos reaccionar, ejem, mejor. You know, asustados al menos.
—Supongo que la televisión nos quita sensibilidad.
Donghyuck pasó la mano por encima de lo que quedaba de la caja torácica antes de que la aplastara con su trasero y encontró una etiqueta prensada sobre el hueso.
—Cien por ciento plástico, made in China.— Leyó en voz alta.
Por primera vez desde que llegó, Lucas se agachó para observar.
—¿Qué hace un esqueleto de plástico en medio de las dunas?
—Quién sabe.— Levantó las cejas confundido.— Me resulta interesante que pese al calor de ayer no se haya descolorido el blanco. Debería estar, no sé, más amarillo.
—¿No estaba cubierto de arena?
—La costilla no, y no hay vegetación como para decir que le dio la sombra.
—¿Me estás diciendo que puede ser que alguien puso esto justo ahora?— Lucas tenía los labios tensos en una línea recta.
—No «ahora» sino hoy.— Donghyuck miró hacia el cielo.— Está nublado, supongo que, si llueve, el agua tapará nuestras huellas dactilares.
Ahora sí, Lucas estaba entrando en pánico.
—¿Por qué necesitaríamos algo como eso?
—Si alguien lo puso aquí para embromar sería una lástima que lo encuentren policías y extraigan nuestras huellas.— Lucas tragó en seco.— Hey, chill the heck down, please.
—¡Esto está mal!
—Son huesos de plástico.
—Pero tu estas mirando muy a futuro, es aterrador. No puedo ir a prisión, tengo una beca en la Universidad de New York...
A Donghyuck se le hinchó el pecho y se le tensaron todos los músculos del rostro.
—¿Te vas a Estados Unidos?
Lucas ladeó la cabeza.
—Sí, ¿Por qué luces furioso?— Sonrió con burla.— ¿Tienes envidia?— Donghyuck blanqueó los ojos, se levantó sacudiendo la arena y se empezó a caminar en sentido contrario a Lucas, hacia el grupo.— Hey, ¿Dónde vas? ¡Espérame!
Ser llamado chico raro por esa persona no debería provocarle este vacío en el pecho, Lucas es un idiota. Es lindo, inteligente y atlético, pero es un idiota.
“Aunque puede ser amable si se lo propone, y ese cabello caído sobre los ojos es sexy cuando está mojado por sudor.” Donghyuck se golpeó las mejillas, no debe pensar en eso, después de todo a él no le gusta nada ni nadie. Y, en dos años, estarán a un país de distancia.Mark estaba dentro de la carpa tomando un capuccino que compró en el Timmy's que había en el centro, saliendo de las dunas. Donghyuck aún no volvía del baño así que no tenía a nadie con quién desahogarse.
No había cruzado palabra con Johnny en toda la mañana, cada vez que iba a encontrarlo estaba apegado a Ten. Bufó haciendo burbujas en el café.
—Okay lo entiendo, me gusta.— Dijo para sí.— Nos conocimos en una situación estúpida, apenas tenemos cerca de un mes de amistad y me gusta.
Solo pensaba en reprenderse de lo miserable que era, tan enamoradizo como la princesa Ana de Frozen, quería con un muchacho más grande que él y de dudosa personalidad. Seguramente se crió así por ver puro Disney.
Sin darse cuenta, del capuccino solo quedaba espuma así que salió de la carpa para tirar el envase. Sin embargo, algo lo tomó completamente desprevenido, y fue el rostro de Johnny a milímetros de él en cuando abrió la tela que tapaba la entrada.
—Hola, tengo algo que contarte.— Sonrió alegremente.
—C–Claro...— Tartamudeó.
Mark se hizo para atrás dejando a Johnny entrar a la carpa. Este último se agarró el pecho, inhaló, exhaló e intentó mantener su cara de póker habitual. No lo logró.
—Ahora salgo con tu profesor de francés.— Dijo sin eufemismos.
Hasta en Japón escucharon el corazón de Mark romperse en pedazos.
—Cool.— Sonrió.
Siguieron conversando sobre su colorida nueva relación, aunque Mark no estaba prestando mucha atención. Finalmente, Donghyuck entró a la carpa obligando implícitamente a John a que se marche.
Momentos después llovió y las dunas se desplazaron un centímetro por el viento que hubo. Nadie hizo comentarios sobre el esqueleto de plástico.
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Gangsta [JohnMark]
FanfictionJohn es un estudiante de artes francoamericano, que se fue a vivir a Canadá con tan solo diecinueve años una vez que Trump ascendió a la presidencia y, actualmente, trabaja como asistente de la estilista Wendy Son. Debido a algunos contratiempos -e...