Basta de jugar a matarse, es hora de concretarlo

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⚠️ No imitar nada de lo que se lee aquí, si quieres realizar primeros auxilios debes tener entrenamiento o conocimiento previo.

Contenido explícito, lenguaje vulgar, gore.

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Nadie había notado la habilidad de Ji-Sung hasta que sus ojos finalmente se posaron en él, en la cancha como delantero, moviéndose más rápido que las balas que Chenle dispara.

Su uniforme de fútbol tenía las bermudas blancas, así que el verde del pasto ya lo había manchado. Sus rodillas estaban raspadas por las veces que se deslizó sobre ellas, sus codos un poco también, y es que jugaba como si tuviera todo que perder a pesar de ir ganando.

-He's gorgeous.- Susurró Chenle con lo ojos ojos bien abiertos.

Mark asintió apoyándose en sus rodillas y sosteniéndose el rostro, estaba emocionado de ver a Ji-Sung desenvolverse en su hábitat natural pero no podía evitar pensar en Johnny, que no le contestó los mensajes ni las llamadas desde ayer.

-¿Debería preocuparme?- Dijo para sí mismo.

Un diablito se materializó en su hombro izquierdo y un angelito en su hombro derecho.

-Sí deberías, piensa en las enormes posibilidades de que él esté así por culpa tuya.- Opinó el angelito.

-No vayas, relájate por primera vez en tu vida, ¿qué es lo peor que puede pasar?- Refutó el diablito.

-¡No le hagas caso, Mark Lee!- El apellido con el que fue llamado resonó como eco de una explosión en el interior de su cabeza.- ¡Puede haber sucedido una tragedia!

-Le va a dar un ataque de pánico, pendejo, no está en condiciones de tener otro.- Hizo énfasis en el "pen" del insulto.

-¡No me llames así!- El angelito metió la cabeza en el oído de Mark y vociferó- ¡Recapacita! Sé que Ji-Sung espera que estés aquí, pero piensa por favor, que la pareja de un gángster esté inactiva no es una buena señal.

«Ji-Sung espera que esté aquí...» Pensó.
«Supongo que una hora sin preocuparme no hará daño a nadie.»

-¡Já!- Se agrandó el diablito- Ni siquiera tuve que esforzarme.

Las representaciones de su subconsciente desaparecieron de su memoria y Mark supuso que debería dejar las drogas, si tan solo tomara alguna. Se maldijo a sí mismo por no consumir bebidas alcohólicas ni drogas -ni siquiera de venta libre como el ibuprofeno-, eso quería decir que todas sus alucinaciones y desastres mentales eran a causa de una evolucionada locura. Rayos, eso no se oía para nada bien.

El estrepitoso sonido de la tribuna local le dio un infarto al distraído Mark cuando vítorearon por un gol hecho nada más ni nada menos que por Ji-Sung Park. Hasta Chenle se levantó a aplaudir.

-Damn, este idiota puede parecer súper frío pero se enamora con facilidad.- Jaemin codeó a Jeno, aunque en realidad quería llamar la atención de todos sus amigos.

-Yes, indeed.- Jeno le dio la razón.

-Ay, qué romántico.- Ren Jun se abrazó a Jaemin porque estaba más cerca.

-Pues creo que harían una linda pareja.- Dijo Donghyuck.- Digo, ambos respiran...

-...tienen la misma edad y, tuvieron un nexo especial cuando volvimos de nuestro, ejem, viaje espiritual.- Mark
continuó la lista de cosas en común que Donghyuck intentó hacer, tuvo cuidado de no revelar el verdadero destino y objetivo de su viaje.

Jaemin frunció el ceño, pero no dijo nada al respecto, nadie lo notó igual.

El partido terminó al mismo tiempo en el que el cielo se fusiona de naranja y azul, la hora dorada.

Gangsta [JohnMark]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora