Cena

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-¿Y a que año vas?-. Me pregunta Dereck.

- Cuarto de secundaria, ¿y vos?-. Le miro atento.

-Pase a sexto, me falta este año y salgo-. Sonríe contento.

Terminamos de comer y le ayudo a juntar las cosas de la mesa y a limpiarlas.

-Guille.. -su voz se notaba algo..no se, como si dudara de decirlo, me confundió bastante ya que el es de ir directamente al punto, o al menos me pareció eso cuando me pregunto lo de "¿te van los chicos?"

-¿Que?-. Me seco las manos y le miro atento. Se acerca un poco mas de lo normal. -Hey hey-. Le agarro del pecho diciéndole indirectamente que se quede ahí.

Sonríe burlonamente, ahí volvió a como era antes.

-¿Que pasa? ¿Te pongo nervioso?-. Ríe delante de mis narices y eso me hace molestar mucho.

-Andate a la mierda-. Le empujo y le dejo la mitad de lo que pago por la comida sobre la mesa. El me sigue con la mirada, cuando ve que tengo intenciones de irme se apoya sobre la puerta.

-Hey, ¿a donde pensabas ir?-. Sonrie.

-A mi casa-. Digo firme, esperando que se corra de la salida.

-Una pregunta antes -.

-Bien, dila rápido-.

-¿haz besado a chicos antes?- se muerde el labio sonriente.

¿Pero de que va este? Ahora que lo pienso fue mala idea venir. Si lo hice, pero creo que solo a 2 o 3, y hace demasiado.

-Muevete, por favor.

-Contesta mi pregunta.

-Si, ¿ya me dejas ir?-. Le miro desafiante.

-¿a estas horas y solo?-. Asenti. -Dame un beso a mi también y te dejo.

Para este momento yo ya estaba rojo hasta las orejas, me parecía guapo pero ya besarlo me parecía muy rápido, además ¡yo nunca empiezo los besos! Prefería mil veces mas que lo haga el, y pensaba decírselo.

-¿porque no lo empezas vos?- trage en seco, estaba muy nervioso y avergonzado, apenas podía verlo.

Siento sus manos rodeando mi cintura y uniendo mis labios con los suyos. Luego de unos segundos rodeo con mis manos su cuello y acarició su pelo, siguiendo con el beso.

Para mi mala suerte, lo hace mas que bien. A los pocos segundos siento su lengua entrar de a poco. Una sensación se asentó en mi estómago, pero era agradable.

Cuando esto se esta yendo de las manos, decido separarme, mientras lo hago atrapa mi labio con sus dientes, mordiéndolo.

Deja un ultimo beso corto y me mira a los ojos. No me sale decir nada, estoy con los nervios a flor de piel.

-¿te acompaño?-. Me lo pensé por unos segundos, pero el transcurso iba a ser muy incomodo, al menos para mi.

-No, gracias igual-. Se mueve de la salida dejándome el paso. -Adiós-. Rayos, siento los labios demasiado hinchados, miro la hora y apenas son las 1:30am, ¿que haría si mi mamá sigue despierta? Mañana trabaja de tarde y era lo mas probable. Mejor me quedo un rato dando vueltas.

-Adiós pequeño-. Me lanza una sonrisa y me alejo lo mas rápido posible.

¿que acabo de hacer? Simplemente le tendría que haber empujado..

Una vez que salgo voy lo mas lento posible, doy una o dos vueltas por la avenida y veo que el está apoyado en un arbol.. ¡¿Fumando?!

Camino hasta el y le quito el cigarrillo -¡¿Que haces con esto?!.

-¿que haces por acá todavía, eh?

-Una pregunta no se debe contestar con otra pregunta.

-Pues si, fumo, casi nadie lo sabe solo 2 personas..bueno, ahora tres-. Miro sus labios y los de el siguen un poco hinchados al igual que los mios -¿quieres que te bese otra vez o que miras tanto mi boca?.

Aparto la mirada enseguida y le miro a los ojos -¿Puedes dejar de avergonzarme por lo menos un rato?

-No-. Ríe bajito y me quita el cigarrillo para darle otra calada nuevamente. -Mirá, veni-. Me acerco un poco mas y deja su rostro a muy pocos centímetros del mio -Abrí la boca-. Lo hago mientras el da otra calada y pasa el humo despacio dentro de mi boca. Me desagradaba bastante ese olor, pero diablos, quería que me bese de nuevo.

Una vez que suelta todo el humo roza sus labios con los mios sin llegar a unirlos. Esta vez soy yo quien lo hace, me pongo de puntitas para alcanzarlo mejor, agarrando su nuca y acercándolo un poco mas a mi, uno nuestros labios y retomo el nivel que habíamos dejado en su casa.

A pesar de que el piensa que no me doy cuenta, siento su gran bulto contra mi abdomen, sus manos bajan desde mi cintura hasta mi trasero, lo aprieta suave y me apego un poco mas a él.

-Lindo es mejor que detengamos esto-. Dice con la respiración agitada. Asiento y me separo de el. -¿Mañana nos vemos en tu lugarcito de siempre?

-Claro, adiós-. Ahora si que me dirijo para casa. Pienso en lo que paso hace un rato, supongo que sabrá que soy trans..pero si no, no se como se lo diré.

Vuelvo a entrar por la ventana, no quiero hacer tanto escándalo, mañana tengo ese asunto con mamá y seguro será incómodo.

Apago todas las luces y cirro los ojos, luego de treinta minutos consigo tener sueño y me quedo dormido.

El Chico TransDonde viven las historias. Descúbrelo ahora