Capítulo 27

109 12 0
                                    

Dereck había apagado su celular cuando Germán termino de bañarse. Quizá quería hacer algo, y no quería interrumpir de nuevo. También merecía un poco de atención su novio.

Hoy irían a comer algo, y ambos se encontraban nerviosos.

-¿Te gusta como estoy?- pregunta el castaño mirando inconforme su vestimenta frente al espejo más cercano.

Dereck lo mira y le quita el aliento. Tenía unos jeans blancos ajustados. Muy ajustados. Realzaba bastante su trasero, un trasero no tan abundante pero satisfactorio, por lo menos para Dereck, no se quejaba, le encantaba así. Nunca lo había visto del todo bien, siempre usaba ropa demasiado holgada. Y su camisa algo suelta color negra, con algunos garabetes celestes y azules dibujados. Su pelo todavía estaba algo mojado y desordenado, y en sus pies llevaba sus típicas zapatillas adidas.

-A mi sí me gusta- se coloca detrás de él abrazándolo por la cintura. -¿Por qué a vos no?

-Dereck no te hagas el tonto- dice sintiendo como le sube el calor a los cachetes.

-No me hago el tonto, no lo sé.

-Mira por atras- dice dándose la vuelta, y Dereck mira a través del espejo su vestimenta. Bueno, un poco más abajo de su espalda.

-¿Y que pasa?

-Dereck, tengo muy poco traste, y estoy pantalones son muy ajustados. Estaba esperando a que me ofrecieras unos, tarado. Todo lo tengo que buscar yo- dice quejándose, comenzando a caminar.

No se le hacían incómodos, de echo todo lo contrario. Si no fuera porque se veía mucho esa curva se lo dejaría.

-Te quedan bien, de verdad. Los míos te van a quedar muy grandes Germán- menciona el ruloso.

-Vos porque seguro te gusto yo, entonces también te convences de el fisico- saca unos pantalones cerrando la puerta despacio con el pie-. Pero yo sé que no lo tengo Dereck, mira bien. -rueda los ojos caminando al baño nuevamente.

Ya había mirando bien, muy bien.

-Germán- lo toma de la cintura y retira sus pantalones -A mi me gustan, y no te voy a dar ropa mia. -Sonrie volviendolo a dejar doblado.

-Si me lo vas a dar- dice persiguiendolo.

-No, es mi ropa, y yo digo si te la presto o no- dice triunfante. -Ademas no me convenzo por vos que tu trasero está bueno. De verdad está bueno- agarra su mano y la coloca por encima del pantalón, en su entrepierna ya algo levantada -Si mira como me puse solo por mirarte- murmura divertido en su oído dejando un beso en sus labios.

A Germán lo recorre un escalofrío, y agarra su abrigo diciendo indirectamente que quería irse ya. No tardó mucho en acompañarlo, hizo lo mismo y ambos tomaron un taxi para ir al restaurante.

. . .

Guille reía con algunos chicos que conoció hace..¿Una hora? No lo sabe, pero se siente bien.

A la vuelta para su casa, ya siente mucho cansancio, y busca un lugar para descansar.

Su cuerpo estaba tan relajado, que terminó durmiendose ahí. Ni siquiera estaba lo suficientemente abrigado, de todos modos, había reído como nunca con las payasadas que hacían esos chicos.

. . .

Ambos tortolitos volvieron, entrando a la casa entre risitas y besos dulces. Se sentaron en el sillón, donde los besos se volvieron más profundos, y excitantes.

-Me encantas- dice bajando los besos a su cuello, el menor enrieda sus manos en el cabello alborotado del otro.

La calentura ya estaba en sus cuerpos, pero cuando la mano de Dereck bajo curiosa dentro de sus pantalones, Germán se separó de repente

El Chico TransDonde viven las historias. Descúbrelo ahora