11 de julio, 2008
-Rayos, en verdad no puedo más.
-Vamos, con fuerza, no seas debilucho.
-Te estoy diciendo que no puedo, ya me rindo.
Ambos soltamos la mesa que estábamos llevando, admito que pesaba bastante, pero él puede, nada más que es vago.
-Te odio tanto, perra- digo sonriendo.
-¡Mis brazos ya están temblando de la fuerza que hice! Ah, de nada. Maldito imbecil- dice cruzándose de brazos.
Estábamos decorando el patio por el cumpleaños de mi mamá, bueno, estaba.
-¿Que me dijiste?- digo acercándome "amenazante"
-Que sos hermoso- dice sonriéndome.
-Ya te vas a arrepentir vos.
Me coloco sobre el comenzando a hacerle cosquillas. Ya después de unos segundos se va quedando sin aire. Veo que ya no lo disfruta, entonces me aparto lentamente.
-Te pegaria, muy fuerte, pero ni para eso tengo fuerzas- dice quedándose tendido en el suelo.
Agarro su entrepierna por encima de la ropa y Emi chilla incorporándose, murmurando un "te odio"
-¿Como?
-Te quiero muchísimo, por favor no lo hagas mas- dice aparentando estar realmente cansado.
-Esta bien- digo y vuelvo a levantarme.
Sigo ordenando un par de cosas más, trayendo muebles de acá para allá, sacando y colocando otros, decorando con vasitos, flores y guirnaldas, todo eso que le gusta a mamá. Emi había traído la torta. Era color amarrillo pastel, muy linda. Había echo también pequeños pastelitos.
Después de terminar todo voy al baño, estoy transpirada en exceso y muy cansado, muy.
Emi también entra y se queda sentado sobre la tapa del inodoro. Ya se le había echo costumbre.
-¿Cuando llega tu mamá?
-A las doce, le dijera su novio que la entretenga hasta esa hora- digo pasando el jabón por mi cuerpo, mientras Tena el shampoo haciendo efecto en mi cabello.
-¿Estas cansado?
-Si.
Sinceramente no daba más, creo que lleve afuera 10 muebles, de los cuales quedaron 3 porque no me gustaban.
-Todavia faltan como tres horas, podés dormir.
-Si..- murmuro cerrando la ducha, ya había terminado.
Agarro el toallon y lo envuelvo en mi cintura, saliendo de atrás de las cortinas.
-Quiero dibujarte, Guille- dice bajito, tímido.
-¿Dibujarme?- comento extrañado.
-Hace unas semanas comencé un curso, quizá me vendría bien practicar.
-¿Por qué no me lo dijiste?
Él se encoge de hombros con una mueca en sus labios.
-Todavia no me parecía lindo lo que hacía..
Asiento sonriente y voy a mi pieza a vestirme.
-Te quería dibujar desnudo- dice en tono claro.
-¿C-como que desnudo?- digo mirándolo.
-Si, desnudo- dice recorriendo mi cuerpo, apresar de tener la toalla, volví mirar, me estaba haciendo dudar
-No me desnudare- digo colocándome la remera, luego los boxer y finalmente una bermuda.
ESTÁS LEYENDO
El Chico Trans
Fanfictionesto no sera el común diario donde la mayoría de nosotros nos desahogamos, me animé a escribir una historia como cualquier otra ;)