Ya había llegado el fin de semana. Se levanta a duras penas y se coloca ropa deportiva. Ayer se saltó la clase de gimnasio y debía recuperarla.
-¿Que te paso ayer?- le pregunta la encargada.
Una chica rubia, tez blanca y labios rosados, con unos ojos azules que parecía que penetraban su alma.
-Yo me-
-No importa, veni que te muestro el circuito de hoy- dice dirigiéndose a la primera máquina.
Guille deja su celular en el escritorio, y camina detrás de la mandona. La chica le enseña el recorrido y explica el funcionamiento de las máquinas que no había usado antes.
Tenía mucha fuerza, muchísima. Incluso levantaba más peso que el que podía levantar Guille.
-¿Entendiste?- dice parándose delante de él, para nada agitada.
-Si, muchas gracias- le muestra una sonrisa, la cual Vanesa corresponde.
Una vez que termina dificultosamente sus rondas, vuelve a tomar con los brazos temblorosos su celular, cansado.
Eran las cuatro y media de la tarde. Decidió conectar sus auriculares antes de despedirse de Vanesa, saliendo del lugar tan acalorado.
Vuelve a su casa despacio, disfrutando del aire fresco golpeando su cuerpo. Suelta un suspiro placentero cuando siente el agua tibia chocar su cuerpo.
Sale con una toalla atada a la cintura mientras escurría su pelo con otra, soltando un grito cuando ve a Dereck y Germán con una sonrisa, sentados en el borde de la cama
-¡¿Que hacen acá?!
-¿Cómo te fue?- dicen emocionados.
-Me fui- contesta a los segundos, dándoles la espalda.
-¿Me estás cargando? ¡Era perfecto para vos!- exclama Germán.
-Alto dormilon- rueda los ojos Dereck.
-Dejen de joder- murmura Guille, colocándo su boxer.
Dereck y Germán se miran, para nuevamente dirigirse a Guille.
-Bueno pero un rato charlaron, ¿No? Él nos dijo eso- dice pícaro.
-Metanse las preguntas por el culo y déjenme dormir- dice antes de colocar su remera.
Se tira en su cama. Bueno, en el espacio restante. Cierra sus ojos soltando un gruñido gustoso, disfrutando de su cama.
Pero claramente tenían que volver a interrumpir su comodidad.
-Con él gruñirías mucho mejor- dice Dereck burlón
-Vamos, que me están tirando otro hormonado mas- dice frunciendo el ceño.
-Oh, no. Charlamos de eso con Em-Amador, Amador dijo que tampoco- dice para después agarrar su pie, supuso que Germán le pegó por algo.
-Si, Amador es muy lindo Gui- lo mira Germán sonriente.
-Amador mis bolas- les responde dándoles la espalda -¡Me dejaron tirado con un desconocido!
-No es un desconocido..- murmura Dereck, y ahoga un grito cuando Germán pisa su pie.
-Lo sentimos- le dice Germán con una sonrisa.
-A la mierda con ustedes.
-Baja un poco los humos eh, que solo queríamos ayudarte a conseguir alguien- frunce el ceño, mirando amenazante a Guille.
-Dereck, yo no les pedí eso.
-Antes que verte más frustrado preferíamos que tengas una cita, para probar. Ya sabes..
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El Chico Trans
Fanfictionesto no sera el común diario donde la mayoría de nosotros nos desahogamos, me animé a escribir una historia como cualquier otra ;)