Chapitre: Un.

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-Eso es todo señoritas, estudien para el examen del lunes y no olviden sus apuntes. Eso les dará una porcentaje extra en el examen final.

Sasha observo a su amiga de cabello rubio con destellos caramelo y ella le devolvió la sonrisa.

La campana sonó y los alumnos cerraron sus cuadernos, Sasha. Una chica de cabello negro y ojos cafés se acerco a la rubia de ojos azules, con picardia y una sonrisa le dejo una paleta sobre su banca.

-No Sasha, lo siento. Pero esta vez no podré ir a estudiar tu casa.

-¿Porque? Amas estudiar sobre la alfombra.

Gerald se aliso la falda tableada color azul marino y colgó su mochila sobre su hombre. No era que Gerald no quisiera ir a casa de su mejor amiga y pasarla de lo mejor.

Lo que realmente pasaba era que la pobre niña de cabello castaño asta la cintura y cuerpo menudo estaba enamorada del padre de su mejor amiga.

Después de experimentar la masturbación con la imagen de aquel hombre en su memoria, verle a los ojos le resultaba difícil, vergonzoso y a la vez éxitante.

Gerald se encogió de hombros y ambas chicas caminaban por el pasillo para llegar a la puerta y así irse a casa.

-De verdad Sasha.- Se mordió su labio tímidamente.-No, no puedo.

Su amiga frunció el cejo y camino detrás de su amiga.

-Ya sé porque no quieres ir.

Gerald trago saliva nerviosa y siguió caminando rezando para que no fuera lo que pensaba.

-Creí que meter a mi perro sería divertido, pero te prometo que no sucederá otra vez. Te juro que lucas ya no mordera tu zapato. Pero por favor Gerald... Vamos a casa y el fin de semana te quedas a dormir.

Gerald sabia que su amiga no dejaría de insistirle, suspiro frustrada observo el techo del pasillo, soltó el aire y miro a su amiga qué le había puesto los ojos más tierno del mundo.

-Está bien.-Gerald acomodo el moño de su media coleta y siguió caminando con su amiga.-Igual, me gusta tu baño. No solo tu alfombra

Sasha sonrió y abrazo a su amiga por el hombro, caminaron juntas por el pasillo enganchadas a sus brazos riendo por la causa de que un chico había tropezado.

-Ahí esta papá.- Dijo Sasha metiendo a su bolsillo un trozo de papel. Gerald se quedó inmóvil y su amiga se quedó a lado de ella.- Tal vez descanso.-Se encogió de hombros.- Como sea, vamos.

Gerald con la cabeza ligeramente inclinada camino hacia la camioneta mercedes color negra junto a su amiga.

Rami era el padre de dos hijos. Uno de ellos, Sasha. Soltero y desgraciadamente viudo tras la muerte de su esposa. Se había quedó al mando de sus dos hijas. La amiga de Gerald y Nach.

Tal vez Rami carecía de una esposa que le diera amor todas las noches, pero cada fin de semana salía con una mujer distinta y nada formal. Dinero le sobraba y le gustaba mal gastarlo en sus hijos y en él.

Sin en cambio la pobre Gerald no tenia la misma suerte, había llegado a esa escuela por un programa de ayuda, las calles de su barrio no eran iguales a las de Sasha. Eran dos mejores amigas en distintos mundos.

-Hola pa.

Dijo Sasha tras darle un beso a su papá en la mejilla y después abrió la puerta de la parte trasera, avento su mochila para después dar un brinco y entrar en ella.

NENA DE PAPI. (TERMINADA) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora