La condición que puso fue que lo dejaran culminar su ciclo escolar en Alabama, sus abuelos accedieron. También obligó a Frank a recibir el dinero que sus abuelos le daban. Solicitó que en cada fecha festiva o vacaciones él pudiera regresar a Alabama para pasar tiempo con Frank, Louis y Becca. Hizo promesas y obtuvo despedidas y regalos, al final, un mes después de que sus abuelos llegaran a su vida, el avión por fin ascendía a su nueva vida. Atrás dejaba ya Alabama y su vida, la tumba de su madre y el amor de su juventud. Delante de él, surgía un nuevo comienzo, un cambio agresivo, quizá hasta atrevido, pero que le deparaba cosas interesantes. Cuatro años en los que terminaría su carrera y volvería, triunfal. Sin embargo, como Michael descubriría más tarde, cuatro años es mucho tiempo, y muchas cosas pueden pasar en ese lapso tan indeterminado. La vida y la muerte son dos entidades extrañas, unidas y confidentes, amantes y secuaces.
El avión se perdió en su ascenso súbito entre las nubes de un blanco arremolinado, Michael dejó Louisiana, y en Louisiana, como un recuerdo que ya parecía lejano, quedaron sus alegrías y los momentos que había compartido con la gente que amaba, volviéndose sueños olvidados que se convertían en un atardecer sombreado. Una asteroide que surca el cosmos hacía un destino incierto.
En el lado norte del país, al otro extremo de donde Michael se encontraba. Algo había captado su atención. Acechando con sobrenatural quietud, observando desde las copas de los árboles, él seguía a su próximo alimento. Con la sabiduría, paciencia y adiestramiento de quizá cientos (o miles) de años de existencia, observó y esperó. Debajo de él una familia caminaba por el bosque, el hombre llevaba una mochila enorme, pero su complexión física era delgada, podía escuchar los jadeos del cansancio a cada paso que daba. La mujer también llevaba otra mochila, esta de menos proporción, pero igual estaba agotada. En medio de ambos, había una niña, debía tener unos cinco años de edad, y era quien más energía tenía, maravillada por el ambiente denso del bosque. El momento de abalanzarse sobre ellos, desgarrar su carne blanda y bañarse en su sangre fresca llegaría pronto.
Muy pronto.
El sol, como sabiendo el horror que había despertado en aquel pequeño pueblo de los limites canadienses, se ocultó entre las nubes.
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El Susurro del Viento
HorrorMichael Miller, un periodista cegado por la ambición, es incriminado en un salvaje homicidio perpetrado bajo órdenes de un político corrupto. Así, Michael es recluido por su propia seguridad en Old Lake Hill, un pequeño pueblo de los límites canadie...