23.

618 35 16
                                    

-Hola. -Digo bajito y casi sin creerme que se esté dirigiendo a mí.

- ¿Qué hace ella aquí? - Dice ahora dirigiéndose directamente a Sticky, y me molesta, me parece una falta de respeto hacia mí.

- Ha venido conmigo. - Se limita a responder.

- Eso ya lo veo, pero no entiendo que hace ella aquí. - Dice, y algo en su tono casi enfadado me hace pensar que es una pose, que está fingiendo y que en realidad no está tan enfadado como quiere hacernos pensar. Pero no estoy segura del todo, y tengo mucho miedo de equivocarme.

- Ha venido conmigo Pucho... - Dice Sticky como derrotado por la situación. Sé que él no quiere pelear, y que ha venido aquí conmigo con las mejores intenciones.

- Ah... - Sonríe irónico. - Ya lo entiendo, habéis venido en plan escapada rural romántica, ¿no?

Una corriente eléctrica de rabia me recorre la columna vertebral de principio a fin, por que no es justo que juzgue la situación sin dejarnos explicar el porqué estamos, bueno o estoy yo aquí, y tampoco es justo que hable con tantos celos cuando siempre fue él quien tuvo pareja mientras que estuvo conmigo. Entiendo que le pueda molestar que yo tenga algo con Sticky, algo que no es verdad, pero no entiendo la hipocresía de culparme a mí de esta situación, y por supuesto que tampoco entiendo tanto odio.

- ¿Cómo puedes tener tan poca vergüenza? - Digo comenzando a soltar toda la rabia que siento en mi interior.

- Eva, déjalo, yo se lo explico. - Dice Sticky alzando la mano delante de mi en señal de que lo deje estar y que no entre al trapo, porque Antón sonríe ante mi reacción.

- No, no Sticky, déjala que hable. - Su tono jocoso termina de armarme de valor, siento que ya no puedo más y exploto, como hacía mucho tiempo que no lo hacía.

- Eres un hijo de puta Antón. - Digo alzando la voz.

- Ten mucho cuidado Eva, y no te pases de lista. - Dice en tono amenazante.

- ¿Qué no me pase de lista? ¿Qué no me pase de lista? He tenido que aguantar tus idas y venidas durante mucho tiempo y al final resultó que tenias novia... - Digo alzando más y más la voz, noto como toda la sangre se concentra en mi cabeza.

Él por su parte tiene el semblante serio, en cambio, Sticky tiene cara de no saber dónde meterse.

-Que para mí no había más hombres, que tú habías venido para salvarme, ¿esto es salvarme? Has jugado conmigo, desde el primer momento, me has utilizado y te has aprovechado, pero no contento con eso, cuando descubro que eres un cerdo...

- Eva... - Dice advirtiéndome.

Pero no me asusta.

- ¿Eva qué? Dilo. - Me enfrento a él.

- Tú no tienes ni idea de nada, así que no hables de lo que no sabes, chula. – Dice con una cara llena de desprecio hacia mí, un desprecio que no me merezco porque yo no he hecho nada.

Me río, por que la situación empieza a hacerme gracia, ahora mismo no queda nada de lo que solía ser Antón para mí.

- ¿Qué viste en mí, una persona a la que cuidar y volver dependiente de ti? – Digo enfocando toda la rabia que tengo acumulada dentro.

- ¿De que coño...? – Pregunta sin entender nada, y de un momento a otro mira a Sticky, como buscando una respuesta lógica.

El corazón me late demasiado deprisa, y siento como la lengua se me pega al paladar.

Bien Duro (C. Tangana)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora