—¿Tarde de nuevo?— Seungmin se veía incrédulo. Pareciese que Minho siempre tenía una excusa.
—Lo siento. Anoche tuve que hacer tarea de biología.— Rascó su nuca con timidez, parecía un cachorro regañado.
Felix suspiró pesadamente, agradeciendo ser ignorado por el resto. Chan dijo que la maestra no les había dejado tarea.
Pero era obvio que uno de los dos mentía, aún así; Felix creía más en la palabra de Chan que en la palabra de Minho.
Minho era extraño, pero ahora lo era aún más.Sí Jisung estaba ahí, Minho no estaba.
Sí Jisung reía, Minho callaba.
Sí Jisung sacaba el tema del alfa, Minho desaparecía.Ese era el problema. Felix fue el único capaz de darse cuenta; Minho estaba dolido.
Pero Felix también tenía sus propios problemas.Era receso, por lo que fueron a la cafetería.
Estaba casi llena como siempre, los alumnos iban y venían con sus almuerzos, charlando de cosas de adolecentes y el tema más sonado: El baile de parejas.Estaba cerca y más que pensar en los exámenes, estaban centrados en qué vestido o traje usar, cuál peinado y sobre todo, con quién irían.
Cada curso no tenía solamente a un alfa, tenía a los alfas. Chicos totalmente irreales que lograban despertar las hormonas de cualquiera cerca de ellos.
Quien tuviera el privilegio de ir con alguno de ellos al baile, sería admirado por el resto del año.—¿No iremos a la casa de Chan mañana?— Jisung se veía confuso, se supone que el mayor iba a preguntarle a su madre si tenían permiso de ir allí para pasar el día, pero antes de siquiera obtener una respuesta, Chan había vuelto a huir hace media hora.
—Que pase el desgraciado.— Jeongin Levantó su brazo con dramatismo, al mismo tiempo que Bang se acercaba a la mesa.
—¿Desgraciado?— Preguntó confuso, pero sólo recibió un encogimiento de hombros por parte del menor.— Sólo fuí al baño, no exageren.
— Uy sí, al baño.— Seungmin volteó los ojos.— No somos estúpidos, Chan. Los baños quedaban del otro lado.
— Déjenlo.— Felix tomó de su jugo de manzana en cajita.— Cuando se sienta seguro nos dirá.— Miró discretamente a Lee.— Todos tenemos secretos, Después de todo.
— Eso es verdad.— Jeongin asintió. — Pero a lo que veníamos, ¿Iremos a tu casa mañana?
— Bueno la verdad— Chan dejó de hablar para mirar a la nada. Su rostro era un poema de confusión total. —¿Qué está haciendo?
Curiosos, todos observaron a Seo Changbin, de pie sobre la mesa se sus amigos. Seo se acomodaba su gorra negra y alisaba su ropa con sus manos; Mientras un desinteresado Hyunjin le extendía un megáfono.
Hyunjin no sabía qué era lo que Changbin haría, pero poco le interesaba; aún no recibía respuesta de parte de Seungmin y eso le preocupaba.—¡Atención! — El megáfono sonó fuerte y claro. Los alumnos presentes ya tenían su mirada en él, pero poco le importaba.— ¡Tengo algo importante que decir!
— Ahh...Lix— Jisung llamó a su amigo rubio, que aún bebía su jugo de manzana, totalmente desinteresado en el espectáculo de Changbin.— Será mejor que voltees.
—¿Mmh?
—¡Ese chico!— La exclamación de Changbin fue fuerte.— ¡Lee Felix, es mi omega!
Junto con las exclamaciones de los alumnos, Felix no pudo evitar escupir el jugo mientras dejaba caer la caja al suelo. Al instante y con toda la pena que su ser de 16 años pudiera sentir, se volteó y encaró a Changbin, mientras esté seguía señalandolo con el índice y se encontraba a la distancia de dos mesas alejado.
—¡Y todo aquel que planee acercarse a él, se las verá conmigo!
—¡Changbin!
— Hey Lix, hola.— Despreocupado, Changbin bajó el megáfono y sonrió al pecoso delante suyo, con la diferencia de que Felix estaba pisando el suelo.
—¡¿Quieres bajarte de ahí?! ¡Estás siendo el jodido centro de atención!
— Esa es la idea, Lix. — Mantuvo su sonrisa.— Todos deben saber que soy tu alfa.
—¡Pero no somos nada, Changbin! ¡No tiene sentido que lo hagas!
—¿De verdad dices eso?— Seo finalmente bajó de la mesa. Su semblante era tranquilo, como si tuviera todo bajo control.— ¿Cómo podría no hacerlo si después de todo somos predestinados? Sí después de todo, otros omegas estúpidos te desean el mal por algo tan simple como ser mi destino.
— Q-que me molesten es problema mío, Changbin. No es algo nuevo.— Se encogió de hombros.— En Australia no encajaba, en Corea tampoco encajo. ¿Qué sentido tiene que grites a los cuatro vientos que eres mi alfa cuando luego podrías cansarte de mí?— Sonaba dolido. Ese era el drama de Lee Felix, se sentía poca cosa para lograr ser el Omega de un chico tan deseado como Changbin.
Felix siempre se sintió poca cosa en todos los sentidos.— Felix, yo nunca podría cansarme de tí. Te tengo las veinticuatro horas del día en mi cabeza, si eso no es amor entonces creo que necesito ir a un psicólogo.— Soltó una pequeña carcajada.— Pero el lazo que el destino formó para nosotros antes de conocernos, me hizo saber cosas de tí que nadie más sabe. Y de todas formas, sé que no me decepcionaré de conocerte y, si se da la oportunidad, estar a tu lado. No eres poca cosa, no hagas caso a lo que dicen. — Se animó a sí mismo para poder tocar con su pulgar aquellas manchas preciosas en el rostro del menor, cuando finalmente lo hizo, sintió que todos sus problemas desaparecían.— Creo que el destino nos quiere juntos. Eres alérgico a la cereza. ¡Yo soy alérgico a las margaritas!— Se encogió de hombros con una carcajada.— Pero aún así me encanta tu aroma a ellas. No sé qué tienes, pero agradezco al destino por ponerte en mi camino.— Finalmente se apartó del menor mientras caminaba de espaldas y lo miraba fijamente. Casi tropezando al caminar de esa manera, apuntó con su índice al rubio pecoso.— ¡Te conquistaré! ¡Es una promesa, Lix!
—¡Changbin fíjate dónde caminas!— Woojin regañó al pelinegro y lo jaló del brazo para salir junto a Hyunjin rápidamente de la vergonzosa escena que su amigo hizo.
—¡Lo juro por mi amor a tí, Lee Felix!
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Marca ⟩ MinSung ⟨
FanfictionJisung fue marcado y no tiene idea de quién lo hizo. La marca no desaparece, lo que quiere decir que el lazo no fue terminado pero tampoco está roto. MinSung: Minho Top📌 Jisung Bottom📌