𝕤𝕒𝕪 𝕝𝕠𝕧𝕖 『𝘋𝘺𝘭𝘢𝘯 𝘖'𝘣𝘳𝘪𝘦𝘯 & 𝘑𝘢𝘥𝘦 𝘗𝘪𝘤𝘰𝘯. 』

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Toda la mañana se la paso junto a su madre quien la llevo a un Spa, después de ahí fueron de compras, sophia parecía más emocionada que jade pero no era porque jade no estuviera emocionada o feliz, lo estaba y mucho, simplemente trataba de no hacerlo notar mucho.

Dylan le parecía alguien muy lindo, inteligente y atractivo, estaba muy nerviosa por ir en la noche al baile con él, cuando volvió a casa fue por fruta a la cocina y subió a su habitación, eran las tres de la tarde y el baile seria a las siete de la noche, tenia poco tiempo pero mucho a la vez.

Comía de su fruta mientras bailaba y cantaba cual niña pequeña, al acabar de su plato lo dejo en el mueble aun lado de su cama y fue hasta el baño donde lleno la tina de agua y puso un jabón color rosa. Tomo una mascarilla y su celular, se quitó la ropa entrando al agua. Se colocó la mascarilla y cerro sus ojos mientras escuchaba música.

Media hora después salio de la tina de baño y seco su cuerpo por completo, tomo su ropa interior y se la puso para después colocarse su bata de baño, al ir a su habitación noto que estaba ahí su madre por lo cual arqueo una ceja.

Jade: ¿Pasa algo?

Sophia: no, solo quería saber si te podía arreglar yo, quiero peinarte y maquillarte

Jade: claro! Me gustaría que lo hicieras

Tomo asiento frente a su tocador y sonrio, le gustaba pasar este tipo de tiempo con su madre.

Por otro lado dylan tuvo que preguntarle a leonardo donde vivían para poder pasar por jade, tuvo que rentar un traje negro debido a que el no tenia uno que usar, corto su cabello y se arreglo de la forma más formal posible, quería verse bien para aquella chica de ojos verdes, había hecho su mayor esfuerzo en todo esto.

Cuando se consideró listo bajo corriendo tomando sus llaves del auto y subió a este manejando hasta la casa de jade, solo deseaba no llegar tarde pues ya eran las seis con treinta minutos y el baile comenzaba a las siete de la noche.

Sophia sonrio al ver a jade lista, ya se había puesto su vestido y tacones, tomo aquella gargantilla brillante y se la colocó a su hija, después beso su mejilla.

Sophia: te ves demasiado linda corazón

Jade: gracias, mamá

Manuel: vaya! Tengo una hermanastra muy linda -dijo desde la puerta.-

Jade: y yo un hermanastro muy guapo, sisi -sonrio-

Leonardo: voy a estar vigilando a dylan toda la noche -bromeo-

Jade: no hagas eso! Leonardo

Leonardo: es broma boba! -dijo riendo.-

James: no quiero interrumpir pero, en la entrada hay un chico que dice ser quien lleve a jade al baile, se llama dylan

Jade: ya llego -dijo nerviosa, tomo su bolso y metio su celular-

Leonardo: oww, esta nerviosa

Bajo corriendo las escaleras y antes de llegar a la puerta suspiro, salio de la casa viendo a dylan recargado en el auto jugando con una piedra.

Sophia: diviertanse mucho chicos. -dijo al llegar a la puerta-

Dylan alzo la mirada al escuchar esa voz y se sonrojo al ver a jade casi frente a él.

Dylan: te ves muy linda, jade -murmuró.-

Jade: gracias dylan, tu te ves muy lindo también -sonrio- ¿Listo?

Dylan: más que listo -sonrio y tomo su mano para llevarla a su lado del auto, le abrió la puerta-

Jade: que caballeroso -bromeo entrando al auto y viendo este con atención.-

Dylan: bueno, así me educo mi madre -sonrie y cierra la puerta, rodea el auto para después subir- Bueno, vamos que nos espera una gran noche

Jade: estoy segura de que será una gran noche -mumuro volteando a verlo-

El viaje a la escuela fue rápido pues cuando menos lo pensaron ya estaban en el estacionamiento, bajo dylan del auto y fue a abrirle la puerta a jade, tomo de nuevo su mano y camino hasta la entrada para después ir al gimnasio donde seria el baile, en los pasillos estaban las dichas actividades como puesto de besos.

Fueron hasta donde estaban todos pues a ninguno de los dos les interesaba esas actividades.

Jade: todo es muy lindo

Dylan: lo sé, es genial.

Charlaron unos minutos y reían de cosas sin sentido alguno, su conversación fue interrumpida por una voz algo familiar

Marieh: dylan! -sonrio y beso su mejilla-

Dylan: Marieh, hola -dijo algo confuso- ¿y damian?

Marieh: por algún lugar -rie- oh, hola jade

Jade: hola Marieh -murmuro-

Dylan: ¿acaso estas borracha? -arqueo una ceja-

Marieh; no! Para nada, te veo luego lindo -le guiño un ojo y camino lejos de él.-

Dylan: eso fue raro -rie nerviosamente.-

Jade: también incomodo

Rieron ambos y fueron a las gradas a sentarse y seguir platicando sobre algún gusto que tuvieran en común.

Dylan: ¿eres de Brasil? ¿De verdad? -dijo sorprendido-

Jade: sí, soy de Brasil, a los cinco años nos mudamos a NY, donde pase los últimos diez años de mi vida

Dylan: ¿Sabes hablar portugués?

Jade: claro, un poco pero sí

Dylan: ¿Puedes decir algo? -Sonrio-

Jade: Você parece atraente para mim

Dylan: ¿que dijiste? -murmuro-

Jade: -se sonroja- ¿quieres bailar?

Dylan; claro, pero me diras que dijiste

Jade: claro! -se levantó y camino a donde todos estaban bailando.-