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O l i v i a

– Hola –abri la puerta y me lo encontré a Valentín, el que menos quería ver ahora.

– Hola Olivia, ¿Podemos hablar? –asenti y le di lugar para que pasara. Estaba sola en el departamento, Benja estaba en el jardín, igual no faltaba mucho para que saliera.

– ¿Queres tomar algo? –pregunte y el negó rápidamente.

– No, solo quiero hablar con vos –asenti en respuesta, nos sentamos en la mesa de la cocina uno frente a otro– Escucha, yo no soy nadie para meterme en tu relación, pero soy papá de Benja y me parece que hay cosas que ahora debemos hablar –comentó.

– Decime –asenti, ya me la veía venir.

– Él no puede ver a tu novio como padre, porque el papá soy yo –suspire, otra vez con lo mismo.

– Ya lo se Valentín, ya me lo dijiste boludo el nene sabe quién es el padre y quien no, podes dejar de repetir lo mismo doscientas veces, puedo jurar que estas celoso de Ivo –hable rápido moviendo mis manos, cosa que hacia cuando me alteraba.

– No estoy celoso de tu novio, me da bronca que él este con mi hijo –respondió– por eso, vine a decirte que vamos a hacer todos los papeles por un abogado para que el nene este conmigo también –habló.

– Esta bien, pero no te lo vas a llevar a España, es mi hijo no podes llevartelo así de un día para otro, si lo queres tener cerca, quédate acá –comenté.

– No puedo quedarme acá, tengo una novia y una futura hija en España, no puedo seguir tus caprichos de pendeja –sonreí y rodee los ojos.

– No son caprichos de pendeja, está mi hijo en el medio entendes, y no te lo vas a llevar por celos de pendejo estúpido –murmure.

– Es mi hijo, tengo más derechos que vos y me cago en todo, vos seguí tu relación perfecta con fotos porno en Instagram, las cuales también las ve tu hijo de cinco años, yo a Benja me lo llevó a España te guste o no, me dan igual tus opiniones de pendeja,  ah y otra cosa, este departamento es de tu hijo, no da que te cojas a tu nuevo novio en una casa que es de tu hijo –se levantó y salió del departamento dando un portazo.

Apoye mis codos sobre la mesa y comencé a llorar para sacar toda la bronca que tenía guardada, me viene a hacer escenas pelotudas que estoy segura que son celos, yo no quiero que me saque a mi hijo.

Me puse a ordenar el departamento para olvidarme un poco de todo, mente y manos ocupadas para no pensar. La puerta se abrió y enseguida escuche la voz de Benja y Ivo.

– ¡Mamá! –sonreí al verlo y me acerque a abrazarlo.

Ivo le dio la mochila y él se fue a su habitación. Me acerque a mi novio y lo abrace fuerte, escondí mi rostro en su cuello.

– ¿Que pasó hermosa? –susurro, pasaba su mano por mi espalda.

– Valentín me quiero sacar a Benja, se lo quiere llevar a España –susurre, las ganas de llorar volvieron.

– Pero no lo puede hacer así porque si beba, necesita un montón de cosas y papeles, está pelotudo si cree que se la vamos a hacer facil, nadie te va a sacar a tu hijo mi amor –acarició mi mejilla y besó mis labios.

– Mamá, ¿Que vamos a comer? –Benja apareció, seque mis lágrimas y fui a la cocina.

– Estaba pensando en hacer hamburguesa y arroz con tomate y huevo, ¿queres? –sonreí, me acerque a él y bese su mejilla.

– Si mamucha, ¿Ivo te quedas a comer? –sonrió mirandolo, Ivo asintió, los tres fuimos a la cocina. Ellos me ayudaban a cocinar mientras escuchábamos música.

вєиʝαмιи •кнєα• Segunda TemporadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora