045

1.8K 149 7
                                    

O l i v i a

– Oli, yo se que es difícil pero, mi amor  tenes que comer, tenes que ser fuerte por tu hijo, Benja necesita verte bien –Ivo estaba sentado a mi lado en la cama, acariciaba mi mano. Asenti al escucharlo,mordía mi labio inferior para no volver a llorar.

Desde hace un par de días que no salía de casa ni siquiera estaba levantada, desde el día del velatorio de mamá no he podido volver a ser fuerte. Me siento muy culpable por lo que pasó, mi hermano estaba igual que yo.

Quizás si le hubiéramos dado un poco más de atención, o si lo hubiéramos notado desde el principio, eso no hubiera pasado. Pero ahora ya era tarde, ella ya no estaba con nosotros.

Ivo a estado conmigo desde ese día, no ha salido de casa. Y se ha hecho cargo de Benja en llevarlo y buscarlo del jardín. También lo cuidaba, y cocinaba para él. Valentín ni había venido a verlo, por un lado me tranquilizaba, no quería verlo acá, me daba miedo ya.

Benja no lloro ni demostró nada ante lo que pasó, creo que el nisiquiera entendió lo que pasó. Tampoco lo culpo, me gustaría ser como él y no entender mucho de las cosas.

– Mamá –susurro Benja, se acostó a mi lado y me abrazó, acariciaba su espalda y él hacia lo mismo conmigo.

– Vamos a comer, por favor –habló Ivo, lo miré y negué. No tenía hambre.

– Por favor mamá, tenes que ponerte bien –Benja me miro.

– No tengo ganas de comer chicos –hable en voz baja.

– Pero mamá, cuando yo no como, vos me retas porque decís que me voy a enfermar, no quiero que vos te enfermes mamá –Benja se levantó de la cama y salió de la habitación.

– Hacelo por él, me ayudó a cocinar para que vos comas Oli –Ivo dejó un beso en mi frente.

– ¡Ivooo! –sentimos el grito de Benja desde la cocina, Ivo se levantó rápido y fue para ver que le pasaba.

Pasó un rato desde que no se sintieron, pero al rato, aparecieron los dos en la habitación. Benja traía su plato de comida, Ivo traía una bandeja con dos platos y vasos de jugos, les hice lugar en la cama, ellos se hubicaron, yo me senté apoyando mi espalda en el respaldar de la cama.

– Vamos a comer mami, quieras o no –Benja agarró el control de la televisión, lo encendió y buscó una película.

– Son milanesas de pollo, te van a gustar come un poquito –asenti escuchando a Ivo, beso mi mejilla, acarició mi mano y me pasó el tenedor.

Comimos los tres mirando moana, creo que es la décima vez que la miramos, después nos acostado a dormir la siesta. Benja estaba de un lado y Ivo en el otro, me dejaron en el medio de los dos, abracé a mi hijo acercandolo a mi, me hacia bien tenerlo cerca, y mi novio me abrazaba a mi.

– Te amo –susurro Ivo en mi oído, acaricie su mano que estaba apoyada en mi vientre, el dejó un beso en mi hombro y dormimos los tres.

вєиʝαмιи •кнєα• Segunda TemporadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora