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O l i v i a

– Ya comencé a hacer los papeles, el abogado te va a llamar cuando esté todo listo –término el audio de Valentín y tire el celular sobre la cama.

Juro que en su momento lo ame, pero ahora lo estoy odiando más que a nada. No se donde quedó el pibe bueno y lindo de hace un par de meses, el que siempre venía y estaba con nosotros. Ya lo desconocía totalmente.

– ¿Estas bien? –Ivo entró a la habitación, negué mirandolo. Me senté en la cama, apoye mis codos sobre mis piernas y tape mi cara.

– No se lo puede llevar Ivo, él es mi bebé –susurre, él me abrazó fuerte.

– Tranquila mi amor, no hay pruebas para que le den la custodia de Benja, en ese caso la mamá tiene más derecho que el padre, no te preocupes –quitó el mechón de pelo de mi cara dejándolo detrás de mi oreja.

– Pero, ¿ y si pasa? –susurre.

– No va a pasar bebé, nadie se va a llevar a Benja –comentó.

– ¿Quien me va a llevar mami? –preguntó Benja entrando a la habitación, se sentó al lado mío en la cama.

– Nadie bebé –lo abracé, él acariciaba mi espalda.

– Mamá yo no quiero que me separen de vos –susurro, mire sus ojitos y estaban lleno de lágrimas. No podía creer como Valentín se atrevía a esto.

– Campeón, nadie te va a separar de mamá, yo los voy a ayudar a estar juntos, como tiene que ser –comentó Ivo, nos abrazó a los dos. Dejé un beso en su mejilla.

– ¿Vamos a ver películas? –pregunté, pasé mis manos debajo de mis ojos secando las lágrimas que habían quedado ahí– Voy a hacer pororo, ustedes elijan una buena película

– Si mamá –Benja dejó un beso en mi mejilla y se bajó de la cama.

– Todo va a estar bien –asenti escuchando a Ivo, acaricie su mejilla y bese sus labios.

Salimos de la habitación, ellos se pusieron a buscar alguna película copada en Netflix, y yo fui a hacer palomitas de maiz. El timbre sonó, Ivo aviso que iba a abrir, en un par se segundos Nacho estaba junto a nosotros.

– Hola –sonreí, nos dimos un beso en la mejilla, el traía una mala cara– ¿Que pasó? –pregunté.

– Oli... –susurro y comenzó a llorar, lo abracé fuerte. Mire a Ivo y él se llevó a Benja para la habitación.

– ¿Que pasó gordito? –acaricie su mejilla secando las lágrimas que corrían en ella.

– Oli... mató a mamá –habló en voz baja y entrecortada por su llanto.

– ¿Que? –lo mire y el asintió– ¿Quien la mató? –lo miré y comencé a llorar, mi cuerpo comenzó a temblar, ya ni podía tener el control de mi.

– El novio, la mató –susurro, me abrazó y correspondi su abrazó fuerte, ambos llorabamos.

Ivo apareció al lado nuestro con dos vasos de agua, nos sentamos los tres en el sillón del living.

– Mamá me llamó hoy, y me contó que ya no podía más –susurró mi hermano– al parecer el tipo la venía maltratando desde hace un tiempo, me contó que nunca pudo salir de ahí –secó sus lagrimas– Hoy me llamó la policía, me informaron que el chabón se entregó como asesino, pero que se terminó suicidándo frente a sus ojos

– ¿Como no nos dimos cuenta de esto? –susurre.

– A la culpa no me la quita nadie, quizás si le hubiésemos dado atención ella estaría con nosotros –habló mi hermano.

– No puedo creerlo –susurre, tape mi rostro con ambas manos mientras lloraba, no sabía ni que sentir, pero solo sentía un vacío enorme en mí.

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Hasta acá por hoy, gracias por el apoyo que le dan a la novela, son las mejores 🖤

вєиʝαмιи •кнєα• Segunda TemporadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora