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O l i v i a

Capítulo final

Abrí mis ojos, la luz del sol entraba por la pequeña ventana de forma circular que decoraba la pared del barco. Mire a mi costado, Enzo dormia dándome la espalda, me causó ternura su manera de abrazar mi mano para dormir. Levanté mi vista, Ivo no estaba en la cama, pero si había señal de que había dormido. La cama estaba destendida, pasé mi mano por la espalda de mi bebé haciéndole mimos, la puerta del baño se abrió dejando ver a mi novio barra prometido, con solo una toalla rodeando su cintura.

Sonrió al verme, se acercó y dejó un beso en mi frente seguido de un “Buenos Dias, Princesa” seguí mirándolo sin imutar alguna palabra, abrió su maleta y sacó ropa, comenzó a vestirse frente a mi. ¿Enserio íbamos a fingir que nada pasó?¿Otra vez me iba a comer la misma historia?

Enzo se movió y enseguida comenzó a llorar, pesadillas. Lo abracé y comencé a cantarle mientras palmeaba su espaldita, se calmó, le di teta para que se alimentara y así podía volver a dormir. Ivo se metió al baño, salió cinco minutos después, peinado y perfumado.

— ¿Hay planes para hoy? —preguntó acostándose nuevamente en su lugar de la cama. Sólo encogi mis hombros, no podía hablarle. Miré a Enzo, él tenía sus ojitos llorosos aún, pasé mis dedos por su pelo, despacito.

— ¿Te levantaste mal hoy? —Ivo río mirándome, ¿de verdad se estaba olvidando de lo que hizo anoche? —Bue Oli, ¿Que te pasa? —sonrió y se acercó a acariciar mi mejilla, negué y corrí mi cara para que no me tocara.

Golpearon la puerta, Ivo se levantó y fue a abrir. Benja estaba ahí parado, refregando su ojo, aun en pijama. Sonreí y le hice seña para que venga a la cama a mi lado.

— Voy a buscarle el desayuno —comentó Ivo, asenti mirándolo y salió de la habitación.

— ¿Dormiste bien bebé? —pregunté mirando a Benja, pase mi mano por su pelo peinandolo.

— Si mamá, Neo nos leyó un cuento para que durmamos bien —comentó sonriendosonriendo, acariciaba la manito de su hermano.

— ¿Neo ya se levantó? —pregunté y el asintió rápido.

— Estaba con Amadeo mirando videos mamá, ¿queres que lo llame? —preguntó mirándome, sonreí y pasé mi mano por su mejilla.

— No hijo, ya después vamos a verlos —sonreí, él asintió sonriendo.

Ivo entró a la habitación con una bandeja donde traía el desayuno, la dejó sobre la cama a un lado de nosotros. Tenía tres vasos de chocolatada fría, tres medialunas, alfajores de maicena, y dos fuentesitas con frutas, frutilla, kiwi, banana y moras.

— Fue lo que conseguí, solo te venden Café —comentó Ivo, se sacó la remera y se acomodo en la cama al lado de Benja— ¿Dormiste bien campeón? —preguntó mirando a Benja, el sonrió y asintió.

— Sipi —sonrió Benja mirándolo y agarró su vaso de chocolatada.

Mi celular comenzó a vibrar en la mesita de luz, lo agarré y tenía mensajes del grupo de WhatsApp, todos se habían puesto a hablar para ir a desayunar todos juntos, nosotros ya estábamos desayunando acá, les avisé de igual manera que íbamos a subir para estar con ellos después para almorzar.

— Nos vamos a juntar a almorzar todos, por si querés ir, a las una —comenté mirando a Ivo, el asintió mientras comía una medialuna.

Aproveché que el bebé se volvió a dormir y me levanté para ir al baño. Hice mi rutina, me peine y luego volví a la habitación, busqué ropa limpia y fuí a cambiarme de nuevo al baño.

вєиʝαмιи •кнєα• Segunda TemporadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora