La Obsesión Del Nerd

12- "Yo cambié por palabras"

Aaron.

Dejo escapar el humo de mis labios. Me siento relajado. Vuelvo a colocar el cigarro en mis labios, lo succiono con tranquilidad, mantengo el humo en mi boca. Mi vista está pérdida en el techo marrón, no tengo nada que pensar u hacer.

Alicia salió hace poco tiempo, no sé para dónde. Tiro el cigarro por alguna parte de mi oscuro cuarto y dejo salir el humo.

Me siento en la esquina de mi cama con sábanas negras, mis codos puestos en mis rodilla y mi cabeza entre mis manos cerradas como puños. Observó mi cuarto y sonrió, cortinas cerradas color negro, pintura negra en las paredes, todo es de negro, me encanta el negro, es un hermoso color que expresa muchas emociones como; dolor, sufrimiento, muerte...

Quién diría que a un nerd como yo le guste el negro o qué fuma o otras cosas mas con misterio. Me levantó y enciendo la lapto, me tensó al ver una foto de ella en la pantalla, se ve tan tierna , dulce, una niña sensible que no daña a nadie. ¡Ja! me daño a mi sin ningún motivo, dijo palabras hirientes hacía mí, describió que lo soy para ella...Pero, aún así la amo, si, la amo, como a nadie en este mundo. Ella provoca ciertas cosas inexplicables en mi, sentimientos de los que no me puedo deshacer, me tenso con solo verla.

Con mi pulgar trazo su cara en la pantalla, e sacado esas imágenes de su Facebook. Busco otra imagen en la cual ella esta en bikini, sonríe con mucha ternura. Mi miembro se pone erecto al instante, lo acaricio sobre el pantalón. Quisiera masturbarme pero no tengo tiempo, debo acosarla como todos los días, es una manía que llevo haciendo hace un mes, es una necesidad que siempre tengo de verla.

Entro al baño, me deshago de toda mi ropa negra y lentes, paso mi mano por mi pene, enciendo el grifo en agua fría para que mi erección baje.

Hace dos meses salí del hospital de los golpes que me habían dado, no e vuelto al instituto desde entonces. Alicia dice que e cambiado mucho, que ya no soy el mismo niño de antes. Aveces la oigo sollozar en su cuarto, una mitad de mi le duele escucharla, otra no le importa.

Se que e cambiado mucho, demasiado, ella me hizo cambiar, me hizo mas fuerte, una persona que no le importa lo que otras piensen, sienten, hagan o hablen, todo mi cambio se lo debo a ella y sus putas palabras.

Salgo de la ducha con una toalla a mi cintura, me transformo de negro nuevamente; abrigo, pantalón, polo, gorro de lana, tenis y mis auriculares.

Bajo escaleras directo a la sala, Alicia esta sentada en el sofá, toda pensativa mientras teje con lana negra y blanca.

Me dirijo a la puerta.

-¿Vas a salir, Aarón? -pregunta Alicia, observándome con sus lentes rojos.

-Sí, Alicia - afirmó, viendo el marco de la puerta. La escuchó suspirar.

-¿Por qué? -le pregunta a la nada -¿En que falle para qué cambiarás tanto, para que ya no me digas "abu" sino "Alicia"?- suspira con pesadez. Mi cambio la tiene cansada, ella extraña al Aaron que jamás va a volver.

-Todas las personas cambian por algo, por personas, por su físico, por el carácter y más. Sin embargo, yo cambié por palabras, caí en la realidad, en el mundo que hoy en día estamos. -digo, con tono sincero y serio. Salgo de la casa.

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Me siento en una rama del árbol, aseguró de que nadie me pueda ver, miró hacía la ventana de su cuarto, está encendida la luz pero no hay nadie a su alrededor. Debe estar en el baño, como siempre. Bufó.

Pasan minutos y por fin sale del estúpido baño, la admiró de pies a cabeza y sonrió ; un pantalón corto rojo, un crop top blanco y sus sandalias blancas. Observó sus piernas delgadas, su lindo abdomen. Todo lo de ella me encanta, me fascina, me enamora...mi entrepierna empieza a doler.

Mi corazón late fuerte, no dejó de mirarla, ella esta distraída con su celular, miles de latidos van y vienen, no es nada malo, es normal, desde que la conocí me pasa. Sacó un cigarro y me lo fumo, sin dejar de ver cada movimiento que hace.

La noche esta serena, ningún auto u persona pasa, pienso en masturbarme mientras la observó pero eso seria una locura. No me importa, loco estoy por ella. Meg se acuesta boca abajo, deja la lámpara encendida, lo que me permitirá verla mientras acarició mi amigo. Bajo mi cierre, lo sacó por el agujero, se siente caliente y se que su punta está roja, colocó mi mano en el, subo y bajo lento, sin dejar de verla, miró su trasero; redondo, llamativo, grande y definido.

Pienso en como se sentirá estar con ella, en mi cama mientras entro mi pene en su vagina, escuchando sus gemidos, penetrandola lento y luego fuerte, sin herirla... o solo un poco. Sonrió mucho, el deseo me acumula por completo, aumento el movimiento de mi mano, jadeo bajo, el pensamiento no sale de mi mente, giro y cierro los ojos, se siente bien, siento como mi pene va a explotar, aumento aún más y colapsa, abro los ojos, mi semen está en mano, parte de mi pantalón y creo que hasta en el suelo. Sonrió encantado, lo guardo, miró y todo esta oscuro, ya se durmió mi pequeña, me apeó y empezo mi camino a casa.

😜.