Scorpion

Capitulo 22

ADALIA MILLER

Me dolía todo después de esas caída, pero pude observar que ya era de día por lo que suponía era otro día, en la tarde de ayer por un momento creí haber escuchado la voz de mi italiano y rogaba al cielo o a los infiernos que si era él lograra sacar a mi pequeño, logre a medio gritar esperando a que me escuchara pero un paso en falso y me costó un buen de arañones, raspones y golpes en todo mi adolorido cuerpo, levantándome como pude comencé a caminar lentamente por lo adolorida que me encontraba, aquí si rezaba a los infiernos que el desgraciado de Augusto no me encontrara, pero si poder encontrar la salida de este lugar porque hacia un intenso frio pero más cuando anochecía y pasar un día más aquí seria definir mi muerte.

-Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh, Dios, ayúdame, necesito salir de aquí, volver con mi hijo, grite frustrada parándome un rato a descansar pues todo de mi me lo pedía a gritos, me senté cerca de un árbol, ya que de pronto me sentía extraña, un malestar ocasionado por un leve mareo y unas nauseas que si no he vomitado es porque casi no tengo nada en el estómago.

-Adalia, Adalia, grito una voz reconocida a lo lejos.

-Pequeña, ¿Dónde estás?, dijo otra voz áspera y horrenda también conocida pero tenía que responder a la primera voz.

-Stefanoooooooo, stefanooooooooo, eres tu, aquí abajo, grite todo lo que pude mientras buscaba un lugar donde esconderme irónico rezaba porque me encontraran y me escondía .

-Shh muñequita, dijo una voz atrapándome por detrás y tapándome la boca con su mano, deseando quitar su asquerosa mano de mi boca mientras escucho a mi italiano gritar, así que como puedo le doy un codazo en la costilla derecha haciendo que provocara soltarme y maldiciéndome.

-Maldita perra, dijo adolorido como pude tome una rama gruesa y lo golpee haciendo que callera desmayado o muerto, sabrá el diablo.

-Pequeña, ¿Dónde estás?, grito mi italiano nuevamente.

-Stefano, por acá, dijo y lo veo acercarse y agradezco a los infiernos que me permitieran volver a verlo con mi pequeño Derek, cuando él llega hasta mi siento que todo me da vueltas y las ganas de devolver no se detienen esta vez y saco lo que no tengo.

-¿Estás bien Adalia?, pregunto angustiado mi italiano y niego.

-No, me duele todo, me da vuelta todo y tengo unas terribles nauseas, supongo que debe ser porque no he comido, digo y asiente para tomarme en brazos.

-Pero que escena más romántica, dice la voz desdeñosa de Augusto, como el infierno ni el diablo lo quiere allí.

-Cómo el infierno que estas vivo, dijo mi italiano incrédulo.

-Hierba mala nunca muere no has escuchado ese dicho, dijo en tono burlón augusto.

- Así que hasta el diablo te regreso, digo en tono de burla haciendo que su semblante se ponga tenso.

-Pero tú le harás compañía, dijo para luego disparar logrando darme, al mismo tiempo que escuche otro disparo y todo se vuelve oscuro

Flashback

-mami, mami, dije sonriendo para correr hacia aquella hermosa mujer que tenía frente a mis ojos.

-¿Qué paso mi pequeña capullito?, dijo la hermosa mujer con una voz tan dulce y suave.

-Mira mami, dije mostrándole un pequeño gusanito.

-Eso es un gusano pequeña, suéltalo en el jardín para que viva ahí, dijo y la pequeña sonreía mientras asentí y se iba corriendo hacer lo que hermosa madre le había dicho.

Flashback

-Papi, te amo, dijo la joven niña llorando a su añorado padre.

-Yo también pequeña, promete que cuando no este, apoyaras a mamá en todo, serás buena niña, obedecerás a mamá en todo, dijo aquel hombre en su lecho de muerte.

-Sí, papá lo prometo, pero no nos dejes, dijo nuevamente llorando la pequeña mientras su doliente padre le tocaba la mejilla.

-Oh mi pequeña te amo, y siempre viviré aquí, dijo el hombre tocando el corazón de la pequeña para luego fallecer mientras su atormentada madre no hacía más que ver la conmovedora escena llorando como si de una fuente se tratara.

POV STEFANO D'ANGELO.

Me lleva el infierno con el hijo de puta de augusto el malnacido logro dispararle en el hombro a Adalia pero cuando ella se desplomo sentí lo peor y le dispare sin pensarlo, ahora ella se encuentra delicada están intentando sacarle la bala, los médicos aún no han querido decirme nada ya llevo más de una hora y estoy impaciente, obviamente no estoy solo Frank ha estado conmigo desde que les comunique a la mansión lo sucedido y se lo agradezco si no yo ya hubiera entrado a la sala hacer un escándalo.

-Hey, bro deja de dar vueltas, harás un hoyo en el piso, te iré a traer un café, dijo y negué solo no quería nada.

- Solo tráeme un agua, dije y asintió para irse, después veinte minutos apareció el médico.

-Familiares de la paciente Miller, dijo y me levante rápidamente.

-Yo, soy su esposo, ella ¿está bien?, dije sin mediar palabras que me salieron de lo profundo de mi corazón.

-Ella ya está fuera de peligro está en sala de reposo, pero me temo informarle que sufrió varias lesiones en costillas, no hubo hueso roto alguno afortunadamente, lo que si hubo fue mucha desnutrición y deshidratación, y... y una violación su zona vaginal muestra daño, pero ira sanando con cuidados y medicamentos, además de ahora en delante de acuerdo a su delicada salud y en su estado debe alimentarse y rehidratarse bien, dijo el médico haciendo que frunciera el entrecejo.

-¿Su estado?, pregunte.

-Así es la señora está embaraza, aunque no puedo decirle de cuanto esta pero en cuanto despierte podrán pasar con la ginecóloga, dijo y asentí sin entender aún muy bien un bebé. Un bebe que podría ser mío, o de..,no, un bebe que es mío sin importar nada, pensé y cuando reaccione me encontraba emocionado por la noticia pero ahora a esperar a que despierte para ver como lo toma mi pequeña, me di vuelta de la emoción encontrando con un Frank muy sorprendido pero que me felicito.

Después un buen rato, por fin pude pasar a ver a mi pequeña tan pálida pero aún muy hermosa, con sus ojos cerrados descansado pero espero que ya habrá los ojos necesito ver el brillo en ellos.

-Pequeña, necesitas despertar te necesito, Derek te necesita, Frank igual, dije tomando su delicada mano,-Todo estará bien hermosa, ahora si todo estará bien, dije y de pronto el electrocardiógrafo empezó a sonar con impaciencia.

-Doctor, doctor, grite alterado haciendo que enfermeras y el doctor corrieran al cuarto.

-¿Qué pasa?, ¿Qué tiene?, pregunte preocupado.

-Tiene que salir de aquí, dijo y negué,-He dicho que tiene que salir es delicado, dijo y asentí saliendo.

-¿Qué paso?, pregunto el alemán.

-No sé, de pronto la cosa esa del corazón se alteró , dije y asintió.

- Estarán bien, vas a ver, dijo y asentí porque locreía ella era fuerte.