7. Ayudar

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Darren

Salgo de la ducha en mi forma de mujer y bostezo. Seyn debe tener razón, me está por agarrar gripe ¡He dormido un montón, también bañado, hasta tomé café, y sigo con sueño! Maldición.

Me pongo un vestido y camino hasta el living de la casa. Debo activarme, haré cosas. Aunque si hago esfuerzo, Seyn se enojará, mejor haré algo simple. Me siento en el sillón a escribir resúmenes, no puedo perder ningún segundo con mis estudios. Debo terminar pronto así me ocuparé de la fundación. Me hubiera gustado ir al orfanato, pero está muy lejos. Mierda, ya me dió sueño otra vez. Mis ojos pesan y reacciono cuando suena el timbre.

Corro a abrir la puerta.

—¡Ah pero si es mi guapo guardaespaldas! —expreso feliz al ver a Emmet.

—Hola —dice sin expresión y entra.

—Que raro que no entres por la ventana —bromeo.

—¿Y Seyn?

—Trabajando.

—Que raro que estés en la casa —opina.

—¡Lo mismo digo, pero me estoy por enfermar! —Me río.

—No te ves enfermo.

—¡Pienso igual! Y es por eso que eres mi guardaespaldas —Muevo el dedo —. Siempre sabes cuando me ocurre algo.

—Hablando de enfermos —Se sienta en el sillón a su velocidad de vampiro —¿Puedes ayudar a Blake?

Sonrío.

—Me encantaría.

Mi collar brilla entonces siento como si la energía volviera a mí. Miro a la mariposa que revolotea alrededor mío. Sé que ella se alimenta de energía positiva, la cual obtengo cuando hago buenas acciones, pero ella no me quita la energía, sino que me la da. ¿Será que no hice bien mi trabajo como restaurador ayer? Estoy confundido, la magia blanca nunca ha ido en mi contra y las voces no están aquí, no comprendo.

—¿Qué pasa? —pregunta Emmet al yo quedarme pensativo.

—Es que de repente me siento mejor, ayudemos a Blake.

—¿Cómo?

—No lo sé, pero lo averiguaré.

Ellas están aquí #7Donde viven las historias. Descúbrelo ahora