capitulo 9

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Narrador*

Las chiquillas se quedaron calladas por unos segundos meditando lo que Rodrigo les había dicho, hasta que una de ellas hablo.

-estoy de acuerdo- hablo Carolina, todas la miraron
-hemos pasado por cosas peores y más dificultades en nuestra corta vida, ¿Por qué no aceptar este reto?-miro a cada una de sus amigas detenidamente

-estoy de acuerdo-hablo Michelle- creo que sería bueno aceptar, después de todo, si esos tipos de la otra vez vuelven a aparecer, por lo menos sabremos como defendernos-concluyo con un tono serio

Antonella y Antonia se miraron entre sí, ambas no podían negar que sus amigas tenían razon, asi que ambas decidieron aceptar sin ninguna duda.

-muy bien-todas las miradas se dirigieron al mayor- ya que todas aceptaron les mostraré donde podremos entrenar

Seguido de eso el mayor guío a las 4 al amplio patio del lugar.
Una vez a fuera el profesor Rodrigo se sacó la chaqueta y volteo a ver a las chiquillas.

-chiquillas por favor acérquese-les llamo la atención- como yo sé que están recién empezando, hoy solo aremos un par de ejercicios que ayudarán a su condición física, ya que no es bueno empezar a ver sus habilidades sin que su cuerpo este preparado unos días antes- el mayor miro a las menores detenidamente

Una hora después las chiquillas ya estaban listas para comenzar

Narra Carolina*

Ya habíamos terminado de estirar, yo me sentía muy entusiasmada por saber cuáles eran mis habilidades, si lo sé soy algo rarita, pero en mi defensa digo que las chiquillas también son raritas, y que las raritas tenemos que estar juntas.

-ya Carolina tu primero, al centro del patio-dijo el profesor

-¿y porque yo?-hice un puchero mientras me apuntaba a mi misma

-porque yo lo digo-

-aaaaaa-me quejé, estoy entusiasmada pero no para ser la primera weona que se coloque ahí

-¿no quieres ser la primera?- me preguntó algo incrédulo

-no, no quiero ¡¿Y SI EN UNA DE ESAS ME MATA Y DESPUÉS SE DESACE DE MI CUERPO TIRANDO LO A UN RIO?!

-deja de pasarte rollo oh, y si te Mori una menos no ma po!- me dijo la Antonia
(Se me salió lo chilena XD)

-deja te de alaraquear tanto mujer, y no me importa si no quieres, anda- me ordeno el profesor Rodrigo con una sonrisa burlona

-¿Y entonces para que me preguntó si no quería ir? No ve que me pasó rollos- dije caminando al centro del patio

-por educación- se encogió de hombros

Las chiquillas soltaron una carcajada muy sonora

Cuando estuve en el centro del patio el profesor me empezó a dar las instrucciones. Intenté concentrarme lo más que pude, era bastante difícil.

-muy bien! Lista?- lo escuché decir

-claro que no- sentía como mi cuerpo estaba algo tembloroso pero poco a poco la inseguridad se fue y concentre la energía de mi cuerpo en mis manos.

Narra Antonella*

Me mantenía en mi lugar de lo más bien, esperando expectante lo que sucedería a continuación; pude ver cómo el profesor Rodrigo lanzaba unas cuatro rocas a gran velocidad hacia la caro.
Sentía miedo por Carolina de que le pasará algo, pero seguí observando.

La primera piedra fue desviada hacia arriba, luego las otras dos hacia los lados pero la tercera...

Narra Carolina*

Logré desviar las tres primeras piedras, no sé cómo lo hice, pero lo hice; pero cuando estaba por desviar la cuarta... Un fuerte dolor de cabeza me izo perder la poca concentración que había reunido... Y de pronto todo se volvió negro...

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Continuará...

No mentira XD
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Narra Rodrigo*

Unos segundos....

Unos segundos bastaron para que Carolina terminara en el suelo inconciente.

Solo unos putos segundos;
Cuando me di cuenta de que no iba a poder detener la piedra, empecé a dirigirme rápido hacia ella.
Pero no lo suficiente, ya que cuando llegue ya había caído al suelo... inconciente.

-¡Carolina!- escuché la voz de las chiquillas a mis espaldas

-rápido, Michelle ve a abrir la puerta para poder entrar sin chocar, Antonella prepara uno de los sillones para recostar a la Carolina mientras que tú Antonia, ve por "botiquín" de emergencia- le ordené a todas

No fue necesario decirlo dos veces, todas hicieron exactamente lo que les pedí.

Tome a la caro con cuidado, me dirigí hacia la puerta mientras que la Michelle me ayudaba a no chocar con algunas cosas, al llegar a la sala principal la Antonella y la Michelle me ayudaron a recostar a la caro.

-profesor aquí está el botiquín- dijo Antonia entregándome la cajita en mis manos

-muy bien, si no me equivoco debe de haber algo para las heridas en el entrenamiento... Si.. aquí hay!- me arrodille junto a Carolina- Michelle ¿Puedes levantar la polera de la caro por favor? Necesito ver dónde se produjo el golpe-

-s-si, claro-

Cuando la Michelle levantó un poco la polera de la Carolina pude ver claramente el gran hematoma que le había causado la piedra; en este momento agradezco de que mamá Elena me haya regalado algo de medicina para este tipo de situaciones.

Tome aire y abrí el frasco, coloque unas tres gotas sobre el hematoma y masajee un poco. Lo que era un gran hematoma se redujo a un moretón, dos segundos después, Carolina fue despertando poco a poco.

Narrador*

Cuando la menor estuvo totalmente despierta con la ayuda de sus amigas fue llevada a su casa, ya que después de ese incidente el mayor decidió que el entendimiento se dejará hasta ahí, y de paso les dió a nuestras protagonistas unos tres días libres para que descansarán, sobretodo Carolina.

Aunque no todo sale como uno espera... Puede que eso sea para bien o para mal...

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Continuará...

Corazones De Oro.  (En Proceso)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora