Chica mala [Finalizada]

Capítulo 11

¡Hola! ¿Qué tal?

Aquí está el Capítulo 11 *wiiiiiiiiii*

¿Qué os está pareciendo la historia? Os confieso que cuando escribí el prólogo mi idea no era para nada esta, si no que era narrar su vida en la universidad, entonces pensé: No, eso no que ya está muy visto.

Y así quedó.

Ya no incordio más, leed tranquilos.

***

Recuerdas tu pasado y te das cuenta de que hiciste un millón de cosas mal, que la cagaste totalmente. Pero eso no siempre significa que estés condenado eternamente, que no puedas ser feliz, que una maldición caiga sobre tí provocando la muerte y el dolor de todos aquellos que se te acercan. En momentos como estos me detengo a pensar que hubiera sido de mi vida si aquella noche mi padre me hubiera matado, si yo no estuviera viva nada de esto estaría pasando, todos estarían felices y tranquilos. Y luego viene cuando Kate me abraza y llora en mi hombro, cuando Liam presiona sus labios contra los míos. Quizás mi muerte no fuera la solución ya que, al parecer, a estas personas las hago felices a pesar de todo. Y tras eso el recuerdo de Sean me atormenta haciéndome sentir una mierda de nuevo. Pero ya nada importa, solo hay una cosa en mi mente: encontrar al cabrón que esta dañando las vidas de tantas personas.
Porque por mucho que odiara a Tyler y a Sandy, ellos tenían familiares y amigos que ahora están hechos polvo. Estoy destruyendo a todos y, sin embargo, ellos son tan masoquistas cómo para no quererme lejos. Pero, ¿qué debería hacer? ¿Irme y dejar a las personas que amo o provocar sus muertes?
La primera opción es la más sensata, pero no me veo capaz de ejecutarla. No tener absolutamente nada, y de repente tenerlo todo,es una sensación de plenitud que deseo seguir sintiendo el resto de mi vida... pero no quiero hacer daño a más gente... ¿Qué hago?

—¡¿Sky?! —exclama Liam, pasando una mano de arriba a abajo enfrente de mis rostro.
—Qué pasa.
—Te fuiste —dice—. Te estaba diciendo que tenemos que descubrir quién es la persona que hace todo esto...
—¿Ah sí? ¿Y cómo? —suelto—, dime cómo diablos vamos a encontrar a ese jodido psicópata, si no tenemos nada... ¡Nada! La gente sufre a mi alrededor... no quiero que nadie más salga lastimado —me cubro el rostro con las manos tratando inútilmente de tranquilizarme—. ¿Qué será hoy? ¿Eh? ¿Quién morirá? ¿Kate? ¿Sean? ¿Tú? -sigo, descubriéndome el rostro y mirándolo a los ojos—. No puedo más Liam.

Él se queda callado y lo único que hace es envolverme en un abrazo.

—Eres Skyler Waters, tú puedes con todo —susurra contra mi pelo.

***

Golpeo con fuerza el saco de boxeo. Sí. Un saco de boxeo. Necesitaba liberar todo esto que llevo dentro, por lo tanto me he puesto a dar puñetazos y patadas brutales a uno de los sacos de boxeo que hay en el gimnasio. Mi rostro está húmedo por las lágrimas, mi cuerpo sudado y mis nudillos ensangrentados por golpear sin guantes. A pesar de todo me siento mejor, más liberada.

Entonces mi móvil suena y me temo lo peor. Paro de golpear y me dirijo hacia mi mochila, en la que guardé mi móvil. Busco con manos temblorosas en el bolsillo interior hasta encontrar mi smartphone. Trago saliva, inspiro, espiro y descuelgo.

—¿D... Diga? —suelto en apenas un susurro.
—Sky —contesta una voz ronca y cansada al otro lado de la línea.
—¿Quién es? —pregunto.
—Sky...
—Por favor dime quien eres —pido con frustración, pasándome la mano que no sujeta el móvil por el cabello.
—Skyler ayúdame.

Y logro reconocer la voz.

—¿Sean?
—...
—¡Sean contéstame, joder! —exclamo con nuevas lágrimas surcando mis mejillas.
—...
—¡SEAN!