Una Aventura con los Creepypastas.

Problemas en el Palacio.

Todo empezaba aclararse, estaba en una habitación y logre observar un símbolo que se me hizo familiar, un leve dolor se hizo presente junto a varios recuerdos, repentinamente caí me queje por el golpe, pero al levantarme estaba donde el del parche, observe a todos lados.

-si lo estas buscando esta donde no podrás ir.

-Bill, teníamos un trato.

-Digamos que su estupidez, hizo que propusiera un trato mejor -chaquéo los dedos haciendo que mis heridas desaparecieran- es algo temporal, volverán a aparecer si te sigue negando a los recuerdos.

-Tks...¿Cuando volverá?, lo esperaré.

- Si planeas reclamarle ya no estas en tu derecho, y sera inútil.

-¿Por qué?

-Digamos que ahora me pertenece...

No pude si quiera pensar en una respuesta pues he regresado a mi habitación de la creepyhouse.

-¿Angela?- Rique

-no idiota, soy slenderman.

- oye tranquila ¿que paso?, ¿donde estabas?- Angle.

-¿Donde esta Enrique?

Les explique lo sucedido con Bill.

-Entonces ¿recuerdas?...

-Esos no son mi recuerdos...

De nueva cuenta un dolor se hizo presente pero esta vez fue en todo el cuerpo, recordé lo que dijo Bill de lo que pasaría si los sigo negando, diversas marcas y heridas se hicieron presentes.

-Ángela, no puedes seguir así hermana o...

-Chicos, ya basta ¿si?, ya nada de eso importa.

-¿Que no deberíamos ir por él?- Rique.

- Que valla Nina, yo... ya no puedo.

Salí de mi habitación, cada paso era más doloroso que el anterior, por más de lo que dije y hubiera dicho, no podía simplemente abandonarlo a su suerte.

-Pequeño caramelo ¿estas bien?

-Jack...hace siete años que no me llamabas así y si lo estoy...bueno casi.

- De acuerdo Slenderman ya soltó la sopa, debo decir que las cosas se estaban poniendo mas raras de lo normal.

- Espera... pero...

-Todos están dispuesto a apoyar y debido a que el novato no regreso he de suponer que esta en problemas.

Sigo sin lograr responderme que demonios hice para tener un amigo así.

-No quiero involucrarlos a todos... Oye ¿podrías enviarme arriba?

Simplemente sonrió ampliamente, lo seguí hasta la azotea de la Creepyhouse, algo me decía que me descubrirían si voy a mi manera, dibujo un extraño símbolo en en suelo.

-La ultima vez que regrese fue con Isaac... Tks...Colocate en el centro y cierra los ojos.

Hice caso, escuche a Jack decir algo en un idioma que no logre...o más bien no quise identificar, después de un rato ya no oí mas, al abrir los ojos me encontraba en una sala.

-Señorita Luna ¿es usted?.

Gire en dirección de la voz y vi...

-Una gema del alma...

-¿Que hace aquí?, si la descubren causara problemas en el palacio.

-¿Problemas?...oye ¿existe la posibilidad que te escondas?

-Por supuesto, pero ¿que planea señorita?

-Problemas... Solo mantete oculta... Sé que existe otra gema aquí, si puedes comunicarte con él dile que también se oculte.

-Como ordene.

Desapareció de mi vista si más,  salí del lugar y comencé a caminar por el lugar como dueña de este,  tome mi verdadera forma en el camino, liberando orejas, alas y cola.

Varias flechas pasaron a mi lado.

-Quieto Demonio, no se como has entrado, pero serás eliminado...

-oh lo lamento, solo estoy de paso -Gire y sonreí con inocencia.

-Prostetades... Apunten...

-suspire- Ni siquiera un Serafín me dañaría, no gasten su energía, vale.

Aproveche el momento en el que procesaban la información para huir del lugar, generare problemas en el palacio, se que suena estúpido, pero conociéndolo la curiosidad lo matara.

Recibía ataque de todo tipo, ya que las heridas espontáneas me hicieron más lenta no lograba esquivar todos los ataques, corría por los pasillos al azar  hasta que llegue a la sala del trono donde terminé rodeada.

-Esto es malo...

-Si que lo es mi mensajera, si que lo es.

Esa voz llena de autoridad, terror y paz..

-¿Jesus?...

-Ocasionas problemas de nuevo, creí que habías borrado tus recuerdos.

Simplemente miro a  todos los que me rodeaban, me pare con firmeza en el centro esperando el ataque grupal, tal vez no me mataría pero si me dañaría de gravedad.