Aun así no

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El ataque no llegó, en vez de eso Enrique se hizo presente, pero no solo él las gemas gemelas se encontraban en mi bolsillo de la sudadera, una tensión se hizo presente, no puse demasiada atención a la discusión generada entre mi ex y el todo poderoso.

-Se que tienes las gemas o ¿me equivocó?

- No.

Simplemente se las mostré, hablo de nuevo advirtiéndole y amenazando a las tropas e incluso al mismo Jesús, el cual solo le contesto que él ya no gozaba de ningún derecho o poder en suelo santo, para cuando me di cuenta nos encontrábamos esquivando el ataque múltiple, como pudimos logramos alejarnos lo suficiente para descansar un poco, tal vez mis heridas extremas ya no estaban pero las internas no lograban cerrarse.

-Me podrías dar las ge...

Ya no logro terminar su petición pues le había dado un puñetazo a la cara logrando que cayera al suelo.

-¡¿Eres idiota o qué?!

-si, querías lidiar con Jesús tu sola...

-¡No es solo eso!, ¿que no entiendes que termine contigo para alejarte de esto?, ¿que no entiendes que tome tu lugar en el trató para protegerte?,  ¡¿que no entiendes que borre los recuerdos para no arriesgarte más?!, ¿que no entiendes que... Que no quiero que nada te pase?...- a pesar de haber iniciado gritando mi voz se ha suavizado, no puedo creer como es que caigo tan bajo frente a él.

- si, lo sabía -se levantó- también sabia que te enviarían a un hospital psiquiátrico, por cierto pudiste habérmelo dicho.

-¡Espera!, ¿Como te enterraste?, en fin... Si lo sabías ¿Por que seguias conmigo?... ¿Por que sigues insistiendo en estar conmigo?...- mi voz se empezaba a quebrar por lo que miré al piso.

-Porque... Porque te prometí que siempre estaría sin importar que... Nek... Ángela mirame por favor, no digas nada si no quieres, pero aunque sea mirame.

Lo volteé a ver en seco dejando escapar una lágrima traicionera.

-Aun así no... Yo no logré mantener mi palabra, no valgo la pena... Además no somos los únicos involucrados... Siempre logran separarnos haciendo que uno muera y  yo... Yo ya no quiero ver eso de nuevo, me duele, duele demasiado...

Me había acorralado repentinamente contra la pared, su mirada se cruzo con la mía.

-Entonces dime ¿Porque siempre logro encontrarte?, ¿Porque a pesar de las diferencias que nos impongan vuelvo a enamorarme?, ¿Porque estoy tan seguro de que volvería a dar mi vida por ti cuantas veces sea necesario?

-Enrique...

El sonido de las tropas se oyó a unos cuantos metros, me tomo de la muñeca y me teletransporto junto a él, nos encontrábamos en la Creepyhouse, Angle me ahorco por detrás junto a Jack y Jeff, lo que es Nina y Rique corrieron con Enrique, en cuanto a los demás lo más probable es que estén de cacería. Me percate de la ausencia de las gemas, probablemente volvieron a sus salas correspondientes.

-Ángela dame las gemas - Enrique.

-Ya no las tengo.

-Enrique ¿estas ciego? Pendejo, aun después de lo que hizo para encontrarte seguras con el estúpido trato - Rique.

-Bill dijo que estaban mejor pero  es Bill de quien hablamos, aunque por un momento la energía de sus fragmentos se intensificó - Angle.

-Chicos lo siento pero... No tengo muchos ánimos...

Salí corriendo escaleras arriba.

By Angle

Ángela se fue pero Jack fue a alcanzarla dijo que intentaría subir su animo.

-Lobito ¿Que ocurrió? - Niña

-Perro callejero que le hiciste a la minina, jamás le había notado sus ojos tan apagados.

-Nina no deberías decirle hací, los celos de alguien te mataran, y Jeff deja ya los putos apodos- Ike.

-Chicos esto no me esta dando buena espina... Su olor no esta... Ya no la siento...

Una Aventura con los Creepypastas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora